EN LA NAVIDAD DIOS NOS ALIMENTA LA FE Y NOS ABLANDA EL CORAZÓN
Dios ha querido que en la Navidad, las familias se reúnan, se predonen, se reencuentren, viajen a miles de kilómetros para darse un abrazo, que se hagan gastos grandes, que todo el mundo se regale, que todo el mundo se alegre y se sienta más feñoz. Es, la volulntad de Dios que un Niño que no fue aceptado en Belén después de 2010 años sea la fiesta del amor más querida por todos los hombres. Dios lo quiere, no es casualidad.
Sería bueno que los niños dieran y recibieran regalos porque Dios nos ha regalado mucho: Jesucristo niño, a María de Nazaret, la fiesta de Navidad. Como Jesús se nos regala, nosotros regalamos a los que menos tienen, a los pobres un poco de lo que necesitan para estar felices y sonreír también en su vida a veces triste.
Quien escucha la Palabra sabe también escuchar las voces dolientes de los que piden salvación, de los que están en la miseria y en el paro, en la marginación y enel desprecio. Los discípulos de Cristo no podemos desoír sus súplicas, ni pasar de largo. Ellos extienden su mano temblorosa y nosotros la nuestra hacia ellos, porque Navidad es el encuentro de dos manos.
Las de un Niño y las nuestras.
La tradición documentada del pesebre se remonta al s. XIII.
San Francisco de Asís el 25 de diciembre del año 1223, estando la nochebuena en un pueblecito de Italia llamado Greccio y rodeado de sus frailes y de los fieles del pueblo representaron el naciemiento de Jesús. Fue en vivo, una parejita había tenido a su hijito y Francisco les invitó a que representaran el nacimiento de Belén.
Jesús merecía una cuna mejor y, sin embargo, prefirió la cueva de pastores. No había posada para él; vino a los suyos y los suyos no lo recibieron, como dice el Evangelio. Él quiere hoy estar en todas la familias y a veces no hay lugar para Él, la historia se repite: nohay lugar para Él en muchos hogares del mundo.
Jesús nació en Belén y hoy quiere nacer en el corazón de todos los hombres y mujeres entre cantos de gloria a Dios y paz al hombre que ama el Señor, Su cuna fue un pesebre, ahora es el corazón delfiel creyente, hecho de barro y envejecido por el pecado. La Navidad es cosa del corazón y más aún de la piedad popular y de la fe.
P. Francisco Domingo Herrero C.M.
Sería bueno que los niños dieran y recibieran regalos porque Dios nos ha regalado mucho: Jesucristo niño, a María de Nazaret, la fiesta de Navidad. Como Jesús se nos regala, nosotros regalamos a los que menos tienen, a los pobres un poco de lo que necesitan para estar felices y sonreír también en su vida a veces triste.
Quien escucha la Palabra sabe también escuchar las voces dolientes de los que piden salvación, de los que están en la miseria y en el paro, en la marginación y enel desprecio. Los discípulos de Cristo no podemos desoír sus súplicas, ni pasar de largo. Ellos extienden su mano temblorosa y nosotros la nuestra hacia ellos, porque Navidad es el encuentro de dos manos.
Las de un Niño y las nuestras.
La tradición documentada del pesebre se remonta al s. XIII.
San Francisco de Asís el 25 de diciembre del año 1223, estando la nochebuena en un pueblecito de Italia llamado Greccio y rodeado de sus frailes y de los fieles del pueblo representaron el naciemiento de Jesús. Fue en vivo, una parejita había tenido a su hijito y Francisco les invitó a que representaran el nacimiento de Belén.
Jesús merecía una cuna mejor y, sin embargo, prefirió la cueva de pastores. No había posada para él; vino a los suyos y los suyos no lo recibieron, como dice el Evangelio. Él quiere hoy estar en todas la familias y a veces no hay lugar para Él, la historia se repite: nohay lugar para Él en muchos hogares del mundo.
Jesús nació en Belén y hoy quiere nacer en el corazón de todos los hombres y mujeres entre cantos de gloria a Dios y paz al hombre que ama el Señor, Su cuna fue un pesebre, ahora es el corazón delfiel creyente, hecho de barro y envejecido por el pecado. La Navidad es cosa del corazón y más aún de la piedad popular y de la fe.
P. Francisco Domingo Herrero C.M.
EL ADVIENTO, UN CAMBIO DEL CORAZON
La conciencia es una ley de nuestro espíritu, pero que va más allá de él, nos da órdenes, significa responsabilidad y deber, temor y esperanza ...
La conciencia es la mensajera de que, tanto en el mundo de la naturaleza como en el de la gracia, a través de un velo nos habla, nos instruye y nos gobierna.
La conciencia es el primero de todos los vicarios de Cristo (Newman, carta al duque de Norfolk 5).
No sé lo que dirá nuestra conciencia del Adviento y de la Navidad, pero si la escuchamos bien nos dirá que Dios se ha hecho carne "para redimimos y darnos ejemplo de vida" como decía mi catecismo de niño. Todo comienza en Nazaret y se ilumina en Belén, pero para fructificar en las conciencias y en nuestros corazones.
Jesús no nace en Belén para que comamos pavo sino para que nuestras conciencias se acerquen más a Dios y los hermanos, al modo de Jesucristo.
Es bueno en este Adviento mirar en nuestro interior y sin engañarnos, pedir perdón y cambiar lo que tenemos que cambiar. La conciencia es una buena compañera siempre, y más cuando todos queremos preparar un corazón de Navidad cristiana mucho más limpio... ¿qué hemos hecho hasta ahora?
El Adviento es un tiempo de gracia y espera.
Es para extasiamos ante el pesebre de Belén, y como diría Juan PabloIl, el estupor de la Encarnación y del silencio de Jesucristo durante 30 años.
"El Bautista bautiza, y a los que confesaban sus pecados, les daba un mensaje de conversión. Recuperar la pureza original en la que fuimos bautizados. Esa renuncia al mal y a las seducciones del pecado para recuperar la blancura del vestido que nos cubrió en el bautismo.
Conversión es dejar un cristianismo mediocre de "más o menos". Eso nos enseña hoy Mateo en su capítulo 3, 1- 12, en el Evangelio. En la Navidad Dios no nace en el bullicio y el aturdimiento sino en el encuentro entre Dios y nosotros.
Hay que ser mejores, ni tan orgullosos, ni tan egoístas, ni tan sensuales, ni tan materialistas, sino más como Dios nos quiere y el Belén se prepara en el alma de cada uno. Segundo domingo ya han pasado 7 días y nuestra alma ¿ha cambiado a mejor?
Aquella anécdota del nacimiento con luces, música, agua que corre, imágenes que se mueven, día y noche que se suceden, musgo y verdor natural, pesebre de Belén perfecto, ovejitas por todo el nacimiento ...
Al final "se les olvidó un detalle": se habían olvidado de poner al Niño Jesús. Eso nos puede pasar en nuestra Navidad, hay de todo menos Jesucristo.
Recopilación y comentario
P. Francisco Domingo
La conciencia es la mensajera de que, tanto en el mundo de la naturaleza como en el de la gracia, a través de un velo nos habla, nos instruye y nos gobierna.
La conciencia es el primero de todos los vicarios de Cristo (Newman, carta al duque de Norfolk 5).
No sé lo que dirá nuestra conciencia del Adviento y de la Navidad, pero si la escuchamos bien nos dirá que Dios se ha hecho carne "para redimimos y darnos ejemplo de vida" como decía mi catecismo de niño. Todo comienza en Nazaret y se ilumina en Belén, pero para fructificar en las conciencias y en nuestros corazones.
Jesús no nace en Belén para que comamos pavo sino para que nuestras conciencias se acerquen más a Dios y los hermanos, al modo de Jesucristo.
Es bueno en este Adviento mirar en nuestro interior y sin engañarnos, pedir perdón y cambiar lo que tenemos que cambiar. La conciencia es una buena compañera siempre, y más cuando todos queremos preparar un corazón de Navidad cristiana mucho más limpio... ¿qué hemos hecho hasta ahora?
El Adviento es un tiempo de gracia y espera.
Es para extasiamos ante el pesebre de Belén, y como diría Juan PabloIl, el estupor de la Encarnación y del silencio de Jesucristo durante 30 años.
"El Bautista bautiza, y a los que confesaban sus pecados, les daba un mensaje de conversión. Recuperar la pureza original en la que fuimos bautizados. Esa renuncia al mal y a las seducciones del pecado para recuperar la blancura del vestido que nos cubrió en el bautismo.
Conversión es dejar un cristianismo mediocre de "más o menos". Eso nos enseña hoy Mateo en su capítulo 3, 1- 12, en el Evangelio. En la Navidad Dios no nace en el bullicio y el aturdimiento sino en el encuentro entre Dios y nosotros.
Hay que ser mejores, ni tan orgullosos, ni tan egoístas, ni tan sensuales, ni tan materialistas, sino más como Dios nos quiere y el Belén se prepara en el alma de cada uno. Segundo domingo ya han pasado 7 días y nuestra alma ¿ha cambiado a mejor?
Aquella anécdota del nacimiento con luces, música, agua que corre, imágenes que se mueven, día y noche que se suceden, musgo y verdor natural, pesebre de Belén perfecto, ovejitas por todo el nacimiento ...
Al final "se les olvidó un detalle": se habían olvidado de poner al Niño Jesús. Eso nos puede pasar en nuestra Navidad, hay de todo menos Jesucristo.
Recopilación y comentario
P. Francisco Domingo
FIESTA DE CRISTO REY
La Escritura comienza hablando de Jesús, diciendo: « ¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle.» (Mate o 2:2)
Y lo mismo: Mateo 27:) 1... "Jesús compareció ante el procurador, y el procurador le preguntó: « ¿Eres tú el Rey de los judíos?» Respondió Jesús: «Sí, tú lo dices.»
San Lucas nos presenta al Rey Crucificado que lleva al buen ladrón a su Reino.
La crucifixión del Señor la verdadera realeza. El título de la cruz: "Jesús Nazareno Rey de los Judíos" expresa una gran verdad y que se realiza en ese momento preciso de la crucifixión y muerte de Jesús.
El título de Rey aplicado a Cristo se encuentra de diferentes formas en la Escritura: Rey de los siglos, Rey de Israel, Rey de los Judíos, Rey de Reyes, Rey de los santos y Soberano de los reyes de la tierra.
El reinado de Cristo se expone en la Encíclica del Papa Pío XI publicada en 1925. El reinado de Cristo no se obtiene con violencia: "Posee Cristo soberanía sobre todas las criaturas, no arrancada por fuerza ni quitada a nadie, sino en virtud de su misma esencia y naturaleza"
El Papa Benedicto XVI ha señalado, como luan Pablo Il, que el reinado de Cristo no se basa en el "poder humano" sino por el amor y el servicio a los otros, el verdadero reinado no es mandar, imponer, abusar, aprovecharse del cargo.
Nos dice en el Prefacio de la fiesta: "consumará el misterio de la redención humana; y sometiendo a su poder la creación entera, entregará a tu Bondad Infinita un Reino eterno y universal, Reino de la verdad y de la vida, Reino de la santidad y de la gracia, Reino de la justicia, del amor y de la paz." este es el Reino de Cristo y no otro.
San Juan 6: 15, nos dice que no tenía interés en que sea reconocido rey que lo que quería era que "Dándose cuenta Jesús de que intentaban venir a tomarle por la fuerza para hacerle rey, huyó de nuevo al monte él solo". No buscaba lo que buscamos, el cargo, el puesto, la distinción. Buscaba al ser humano. No quería el poder, sino que le buscasen porque era el Mesías.
San Pablo llega a decir: "vivo yo, ya no soy quien vive, es Cristo quien vive en mí". Este es el reinado de Dios en nosotros. Pensar, amar, actuar, sentir, hablar, perdonar, servir. .. , como Jesucristo.
Es el único Reinado de Cristo, ser bastante parecido a Él. Aunque somos todos pecadores siempre hay tiempo para mejorar.
Todos somos un proceso de bondad, con marchas y contramarchas.
Pienso que buscamos otros reinos y reinados de nuestros intereses.
Estamos equivocados.
Me quedo, nuevamente, con las palabras de San Pablo: Filipenses 2,5: 'Tened entre vosotros los mismos sentimientos que Cristo" ... Si no nos identificamos con Cristo, el Reino de Cristo Rey no llegará al menos en nosotros.
Recopilación y comentario
P. Francisco Domingo
Y lo mismo: Mateo 27:) 1... "Jesús compareció ante el procurador, y el procurador le preguntó: « ¿Eres tú el Rey de los judíos?» Respondió Jesús: «Sí, tú lo dices.»
San Lucas nos presenta al Rey Crucificado que lleva al buen ladrón a su Reino.
La crucifixión del Señor la verdadera realeza. El título de la cruz: "Jesús Nazareno Rey de los Judíos" expresa una gran verdad y que se realiza en ese momento preciso de la crucifixión y muerte de Jesús.
El título de Rey aplicado a Cristo se encuentra de diferentes formas en la Escritura: Rey de los siglos, Rey de Israel, Rey de los Judíos, Rey de Reyes, Rey de los santos y Soberano de los reyes de la tierra.
El reinado de Cristo se expone en la Encíclica del Papa Pío XI publicada en 1925. El reinado de Cristo no se obtiene con violencia: "Posee Cristo soberanía sobre todas las criaturas, no arrancada por fuerza ni quitada a nadie, sino en virtud de su misma esencia y naturaleza"
El Papa Benedicto XVI ha señalado, como luan Pablo Il, que el reinado de Cristo no se basa en el "poder humano" sino por el amor y el servicio a los otros, el verdadero reinado no es mandar, imponer, abusar, aprovecharse del cargo.
Nos dice en el Prefacio de la fiesta: "consumará el misterio de la redención humana; y sometiendo a su poder la creación entera, entregará a tu Bondad Infinita un Reino eterno y universal, Reino de la verdad y de la vida, Reino de la santidad y de la gracia, Reino de la justicia, del amor y de la paz." este es el Reino de Cristo y no otro.
San Juan 6: 15, nos dice que no tenía interés en que sea reconocido rey que lo que quería era que "Dándose cuenta Jesús de que intentaban venir a tomarle por la fuerza para hacerle rey, huyó de nuevo al monte él solo". No buscaba lo que buscamos, el cargo, el puesto, la distinción. Buscaba al ser humano. No quería el poder, sino que le buscasen porque era el Mesías.
San Pablo llega a decir: "vivo yo, ya no soy quien vive, es Cristo quien vive en mí". Este es el reinado de Dios en nosotros. Pensar, amar, actuar, sentir, hablar, perdonar, servir. .. , como Jesucristo.
Es el único Reinado de Cristo, ser bastante parecido a Él. Aunque somos todos pecadores siempre hay tiempo para mejorar.
Todos somos un proceso de bondad, con marchas y contramarchas.
Pienso que buscamos otros reinos y reinados de nuestros intereses.
Estamos equivocados.
Me quedo, nuevamente, con las palabras de San Pablo: Filipenses 2,5: 'Tened entre vosotros los mismos sentimientos que Cristo" ... Si no nos identificamos con Cristo, el Reino de Cristo Rey no llegará al menos en nosotros.
Recopilación y comentario
P. Francisco Domingo
CREEMOS EN LA VIDA DESPUES DE LA VIDA
La mayor tristeza en este mundo es para los que no tienen esperanza.
Juan Pablo II decía que el cristiano es un hombre con esperanza. Los ateos, los que no tienen fe, los materialistas que niegan un más allá, que rechazan la existencia de Dios y creen que la creación es un azar, que creen que todo el universo, la naturaleza, las plantas, los animales y los seres humanos son fruto de la sola casualidad, carecen de toda esperanza: más allá de esta vida no esperan nada. A ellos no les queda sino creer que los que murieron ya no existen más, y que una vez muertos ellos mismos, se disolverán en la nada para no existir nuncajamás.
Creemos que se muere una sola vez.
Creer en la fe no es dudar sino estoy seguro pero no lo veo. El cristianismo, aleccionado por el Señor Jesús, fundado en su propia Resurrección, enseña que luego de la muerte habrá un juicio (ver Mt 25,31ss) y que quien sea hallado digno, participará de una resurrección para la vida eterna, en la plena comunión con Dios.
No puede existir la reencarnación. La fe en la resurrección choca de plano con, la creencia en la reencarnación, hoy cada vez más de moda. Los creyentes poco instruidos se engañan cuando piensan que esta creencia en la reencarnación es perfectamente compatible con las enseñanzas de Cristo.
Jesús no enseñó que tendremos vidas sucesivas, sino que enseñó claramente que moriremos una sola vez y resucitaremos una sola vez. Cristo jamás habló de que cada cual tiene que expiar en vidas sucesivas, sino del perdón de los pecados y de la reconciliación que Él ha venido a realizar mediante su Muerte en Cruz. Cristo jamás enseñó que cada cual "se salva" por sí mismo y que Él sólo era un "gurú", sino que Él es el Camino que conduce al Padre, el Salvador y Reconciliador del mundo.
En resumen, no puede ser verdaderamente cristiano quien acepta la doctrina de la reencarnación (ver Catecismo de la Iglesia Católica, números: 988-1014).
La muerte no es el final del camino. Ante el hecho de nuestra propia muerte o de la muerte de nuestros seres queridos no hay que temer. La muerte para el creyente es un paso: detrás de la muerte está Cristo. Él es la Resurrección y la Vida, y Él promete la resurrección y la vida eterna, plena y feliz, a quien crea en Él (verJn 11,25-26).
Recopilación y comentario: P. Francisco Domingo
Juan Pablo II decía que el cristiano es un hombre con esperanza. Los ateos, los que no tienen fe, los materialistas que niegan un más allá, que rechazan la existencia de Dios y creen que la creación es un azar, que creen que todo el universo, la naturaleza, las plantas, los animales y los seres humanos son fruto de la sola casualidad, carecen de toda esperanza: más allá de esta vida no esperan nada. A ellos no les queda sino creer que los que murieron ya no existen más, y que una vez muertos ellos mismos, se disolverán en la nada para no existir nuncajamás.
Creemos que se muere una sola vez.
Creer en la fe no es dudar sino estoy seguro pero no lo veo. El cristianismo, aleccionado por el Señor Jesús, fundado en su propia Resurrección, enseña que luego de la muerte habrá un juicio (ver Mt 25,31ss) y que quien sea hallado digno, participará de una resurrección para la vida eterna, en la plena comunión con Dios.
Tú nos dijiste que la muerte
no es el final del camino,
que aunque morimos no somos,
carne de un ciego destino.
Tú nos hiciste, tuyos somos,
nuestro destino es vivir,
siendo felices contigo,
sin padecer ni morir.
No puede existir la reencarnación. La fe en la resurrección choca de plano con, la creencia en la reencarnación, hoy cada vez más de moda. Los creyentes poco instruidos se engañan cuando piensan que esta creencia en la reencarnación es perfectamente compatible con las enseñanzas de Cristo.
Jesús no enseñó que tendremos vidas sucesivas, sino que enseñó claramente que moriremos una sola vez y resucitaremos una sola vez. Cristo jamás habló de que cada cual tiene que expiar en vidas sucesivas, sino del perdón de los pecados y de la reconciliación que Él ha venido a realizar mediante su Muerte en Cruz. Cristo jamás enseñó que cada cual "se salva" por sí mismo y que Él sólo era un "gurú", sino que Él es el Camino que conduce al Padre, el Salvador y Reconciliador del mundo.
En resumen, no puede ser verdaderamente cristiano quien acepta la doctrina de la reencarnación (ver Catecismo de la Iglesia Católica, números: 988-1014).
La muerte no es el final del camino. Ante el hecho de nuestra propia muerte o de la muerte de nuestros seres queridos no hay que temer. La muerte para el creyente es un paso: detrás de la muerte está Cristo. Él es la Resurrección y la Vida, y Él promete la resurrección y la vida eterna, plena y feliz, a quien crea en Él (verJn 11,25-26).
Recopilación y comentario: P. Francisco Domingo
DEVOCION ES CONVERSION
Jesús entró en la ciudad de Jericó y atravesaba la ciudad; como en este mes de octubre la imagen del Señor de los Milagros atraviesa nuestras calles: "Porque el Hijo del hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido". Cristo quiere encontrarse con todos en especial los más alejados de Dios.
Zaqueo ansioso quiere ver a Jesús y cuando uno quiere lo consigue. Y sin
duda también quería que elMaestro le viera a él. Si hay que subir a un arbol se sube aunque los demás se rían, lo consiguió y Jesús le dice: "Zaqueo, baja en seguida, porque hoy tengo que alojarme en tu casa". Zaqueo bajó en seguida y lo recibió muy contento.
Jesús se invitó y no sólo a comer sino que le exigió alojamiento. Es
instalarse, cenar, dormir, lavarse y con sus amigos, los doce discípulos.
Zaqueo buscaba a Dios y Dios se le presentó como en una "procesión".
La conversión de Zaqueo fue total, radical: «Mira, la mitad de mis bienes, Señor, se la doy a los pobres; y si de alguno me he aprovechado, le restituiré cuatro veces más».
Jesús le contestó: «Hoy ha sido la salvación de esta casa; también éste es
hijo de Abrahán. Porque el Hijo del hombre ha venido a buscar y a salvar
lo que estaba perdido.»
La experiencia nos dice que cuando uno se desprende de los bienes, de la
plata, de las riquezas esa si que es conversión sincera: "La conversión
comprende a la persona en su integridad y no sólo en las facetas
religiosas de su existencia, sino también en sus relaciones humanas,
actitudes ante los demás, criterios de actuación, que han de hallarse en
permanente estado de cambio y progresivo perfeccionamiento" (E. 99).
La devoción verdadera al Señor de los milagros, pasa por la mente y el
corazón. Para nosotros la Procesión del Señor de los milagros es el paso de
Dios en nuestras vidas. Los apóstoles estaban con Jesús pero Judas lo vendió, Pedro lo negó y los demás en el Getsemaní lo abandonaron. No
todos los cercanos y aparentemente piadosos son buenos hijos de Dios.
«No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial». (Mateo 7:21)
y también dice: "Lo mismo pasa con un árbol sano: da frutos buenos,
mientras que el árbol malo produce frutos malos. Un árbol bueno no puede dar frutos malos, como tampoco un árbol malo puede producir frutos buenos. Todo árbol que no da buenos frutos se corta y se echa al fuego. Por lo tanto, ustedes los reconocerán por sus obras".
Es imprescindible, la reconciliación, la eucaristía dominical, la oración, la caridad, el perdonar y el pedir perdón, la fidelidad, y en una palabra, la devoción al Señor de los Milagros tiene que dar buenos frutos si es
auténtica devoción: creer, rezar y vivir lo que creemos y rezamos, de lo
contrario es un árbol sin frutos.
Que el Señor de los Milagros nos convierta de corazón.
Recopìlación y comentario: P. Francisco Domingo
Zaqueo ansioso quiere ver a Jesús y cuando uno quiere lo consigue. Y sin
duda también quería que elMaestro le viera a él. Si hay que subir a un arbol se sube aunque los demás se rían, lo consiguió y Jesús le dice: "Zaqueo, baja en seguida, porque hoy tengo que alojarme en tu casa". Zaqueo bajó en seguida y lo recibió muy contento.
Jesús se invitó y no sólo a comer sino que le exigió alojamiento. Es
instalarse, cenar, dormir, lavarse y con sus amigos, los doce discípulos.
Zaqueo buscaba a Dios y Dios se le presentó como en una "procesión".
La conversión de Zaqueo fue total, radical: «Mira, la mitad de mis bienes, Señor, se la doy a los pobres; y si de alguno me he aprovechado, le restituiré cuatro veces más».
Jesús le contestó: «Hoy ha sido la salvación de esta casa; también éste es
hijo de Abrahán. Porque el Hijo del hombre ha venido a buscar y a salvar
lo que estaba perdido.»
La experiencia nos dice que cuando uno se desprende de los bienes, de la
plata, de las riquezas esa si que es conversión sincera: "La conversión
comprende a la persona en su integridad y no sólo en las facetas
religiosas de su existencia, sino también en sus relaciones humanas,
actitudes ante los demás, criterios de actuación, que han de hallarse en
permanente estado de cambio y progresivo perfeccionamiento" (E. 99).
La devoción verdadera al Señor de los milagros, pasa por la mente y el
corazón. Para nosotros la Procesión del Señor de los milagros es el paso de
Dios en nuestras vidas. Los apóstoles estaban con Jesús pero Judas lo vendió, Pedro lo negó y los demás en el Getsemaní lo abandonaron. No
todos los cercanos y aparentemente piadosos son buenos hijos de Dios.
«No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial». (Mateo 7:21)
y también dice: "Lo mismo pasa con un árbol sano: da frutos buenos,
mientras que el árbol malo produce frutos malos. Un árbol bueno no puede dar frutos malos, como tampoco un árbol malo puede producir frutos buenos. Todo árbol que no da buenos frutos se corta y se echa al fuego. Por lo tanto, ustedes los reconocerán por sus obras".
Es imprescindible, la reconciliación, la eucaristía dominical, la oración, la caridad, el perdonar y el pedir perdón, la fidelidad, y en una palabra, la devoción al Señor de los Milagros tiene que dar buenos frutos si es
auténtica devoción: creer, rezar y vivir lo que creemos y rezamos, de lo
contrario es un árbol sin frutos.
Que el Señor de los Milagros nos convierta de corazón.
Recopìlación y comentario: P. Francisco Domingo
SEÑOR, QUEREMOS VER A JESÚS
Como todos los años en Octubre, celebra la iglesia, en todo el mundo el día del DOMUND, Domingo Mundial de la propagación de la fe. Es el día 24 de este mes.
Además este año celebramos el centenario del nacimiento de la Beata Madre Teresa de Calcuta. Nace un 26 de agosto de 1910, en Skopie, Macedonia. la antigua Yugoeslavia.
"... Por eso también salió la gente a su encuentro, porque habían oído que éñ había realizado aquilla señal. Entonces los fariseos se diferon entre si: "Veis cómo no adelantáis nada, todo el mundo se ha ido tras él".
Había algunos griegos de los que subían a adorar en la fiesta. Estos se dirigieron a Felipe, el de Betsaida de Galilea, y le rogaron: "Señor, queremos ver a Jesús". Felipe fue a decpirselo a Andrés; Andrés y Felipe fuerona decírselo a Jesús" (Juan 21, 19-22)
Este es el texto del que toma pie el Papa Benedicto XVI apra hablarnos del lema del DOMUND: "Señor, queremos ver a Jesús." No hay una expresión que identifique mejor el por qué de la vocación misionera.
La esencia de la Iglesia es el anuncio del Reino y del anuncio del principio, el centro y la culminación es Jesucristo.
Nos dice la Evengeli Nuntiandi, de pablo VI, 27: "La evangelización también debe contener siempre-como base, centro y a la vez culmen de su dinamismo- una clara proclamación de que en Jesucristo, Hijo de Dios hecho hombre, muerto y resucitado, se ofrece la salvación a todos los hombres, como don de la gracia y de la misericordia de Dios"
No una salvación puramente inmanente, a medida de las necesidades materiales o incluso espirituales que se agotan en el cuadro de la existencia temporal y se identifican totalmente con los deseos, las esperanzas, los asuntos y las luchas temporales, sino una salvaciín que desborda todos estos límites para realizarse en una comunión con el único Absoluto Dios, salvación trascendente, escatológica, que comienza ciertamente en esta vida, pero que tiene su cumplimiento en la eternidad."
Además este año celebramos el centenario del nacimiento de la Beata Madre Teresa de Calcuta. Nace un 26 de agosto de 1910, en Skopie, Macedonia. la antigua Yugoeslavia.
"... Por eso también salió la gente a su encuentro, porque habían oído que éñ había realizado aquilla señal. Entonces los fariseos se diferon entre si: "Veis cómo no adelantáis nada, todo el mundo se ha ido tras él".
Había algunos griegos de los que subían a adorar en la fiesta. Estos se dirigieron a Felipe, el de Betsaida de Galilea, y le rogaron: "Señor, queremos ver a Jesús". Felipe fue a decpirselo a Andrés; Andrés y Felipe fuerona decírselo a Jesús" (Juan 21, 19-22)
Este es el texto del que toma pie el Papa Benedicto XVI apra hablarnos del lema del DOMUND: "Señor, queremos ver a Jesús." No hay una expresión que identifique mejor el por qué de la vocación misionera.
La esencia de la Iglesia es el anuncio del Reino y del anuncio del principio, el centro y la culminación es Jesucristo.
Nos dice la Evengeli Nuntiandi, de pablo VI, 27: "La evangelización también debe contener siempre-como base, centro y a la vez culmen de su dinamismo- una clara proclamación de que en Jesucristo, Hijo de Dios hecho hombre, muerto y resucitado, se ofrece la salvación a todos los hombres, como don de la gracia y de la misericordia de Dios"
No una salvación puramente inmanente, a medida de las necesidades materiales o incluso espirituales que se agotan en el cuadro de la existencia temporal y se identifican totalmente con los deseos, las esperanzas, los asuntos y las luchas temporales, sino una salvaciín que desborda todos estos límites para realizarse en una comunión con el único Absoluto Dios, salvación trascendente, escatológica, que comienza ciertamente en esta vida, pero que tiene su cumplimiento en la eternidad."
DIOS HACE SU PARTE Y NOSOTROS LA NUESTRA
Contemplemos a Jesus, El es el juez justo que atiende los reclamos de la viuda; mírenlo devolviendo vivo al hijo muerto que perdio la viuda de Naím (Lc. 7, 11 - 17).
Escíchenlo condenando a los escribas que devoran los bienes de la viudas (Lc. 20, 47). Vean como este Juez, sensible ante el dolor y la injusticia, aprecia la pobre ofrenda en el templo de aquella otra viuda que de su indigencia dio todo lo que tenia (Lc. 21, 1 - 4). Mírenlo y miremos a Hesus, el Hijo del Hombre, el Jues Justo que escucha nuestras súplicas y sentencia con justicia. Sí, nuestro Juez no es ciego ni sordo ante las injusticias.
Él vendrá, vendrá aunque su justicia se haga esperar para verla plenamente. Él vendrá, perseveremos en la fidelidad, hasta que venga.
Pero también pienso que la ayuda viene tambien de los demás, de los creyentes, de los que nos llamamos y nos decimos buenos cristianos.
Pienso que Dios nos delega para atender a los inocentes a los que menos tienen, a veces además de poca riqueza poca formación para saber defenderse.
Dios no vendrá a solucionar muchos problemas, como no ha sacado a los mineros de las minas. Dios da a loa ingenieros talento y manos a los técnicos para que actúen y Dios obra a través de nuestras manos.
Hay que cuidar usar bien los talentos de cada uno en servicio de Dios y de los demás. A cada uno se le pedirán las cualidades que ha recibido.
En San Mateo 25, Jesucristo nos habla de sacar el máximo fruto de nuestras cualidades, porque ser buen cristiano no es no hacer nada malo sino hacer mucho bueno. Resumiendo, el mundo camina como los cristianos queremos que camine.
Podemos preguntarnos: ¿quién es más importante aquí, el juest o la viuda? Por una parte la mujer que no se atemoriza e insiste para que le haga justicia.
Lo hace desde sus armas: su palabra y su constancia operseverancia; no usa métodos violentos, pero sí convicción de qeu tiene derechos a los que no puede renunciar. Por eso al final, sin convencimiento personal, el juez decide ahcerle justicia.
La perseverancia puede conseguir lo qeu parece imposible. Pero si eso lo ahcen los hambres injustos, como el juez, ¿qué no hará Dios, el más justo de todos los seres, cuando se pide con perseverancia?
Es esa perseverancia, divina y humana, lo que mantiene la fe en este mundo y en le Iglesia. Siempre Dios y el hombre.
Recopilación y comentario
P. Francisco Domingo
Escíchenlo condenando a los escribas que devoran los bienes de la viudas (Lc. 20, 47). Vean como este Juez, sensible ante el dolor y la injusticia, aprecia la pobre ofrenda en el templo de aquella otra viuda que de su indigencia dio todo lo que tenia (Lc. 21, 1 - 4). Mírenlo y miremos a Hesus, el Hijo del Hombre, el Jues Justo que escucha nuestras súplicas y sentencia con justicia. Sí, nuestro Juez no es ciego ni sordo ante las injusticias.
El Señor te guardará de todo mal,
Él guardará tu vida;
Guardará tu partida y tu regreso,
Desde ahora y por siempre.
(Sal. 121, 4)
Él vendrá, vendrá aunque su justicia se haga esperar para verla plenamente. Él vendrá, perseveremos en la fidelidad, hasta que venga.
Pero también pienso que la ayuda viene tambien de los demás, de los creyentes, de los que nos llamamos y nos decimos buenos cristianos.
Pienso que Dios nos delega para atender a los inocentes a los que menos tienen, a veces además de poca riqueza poca formación para saber defenderse.
Dios no vendrá a solucionar muchos problemas, como no ha sacado a los mineros de las minas. Dios da a loa ingenieros talento y manos a los técnicos para que actúen y Dios obra a través de nuestras manos.
Hay que cuidar usar bien los talentos de cada uno en servicio de Dios y de los demás. A cada uno se le pedirán las cualidades que ha recibido.
En San Mateo 25, Jesucristo nos habla de sacar el máximo fruto de nuestras cualidades, porque ser buen cristiano no es no hacer nada malo sino hacer mucho bueno. Resumiendo, el mundo camina como los cristianos queremos que camine.
Podemos preguntarnos: ¿quién es más importante aquí, el juest o la viuda? Por una parte la mujer que no se atemoriza e insiste para que le haga justicia.
Lo hace desde sus armas: su palabra y su constancia operseverancia; no usa métodos violentos, pero sí convicción de qeu tiene derechos a los que no puede renunciar. Por eso al final, sin convencimiento personal, el juez decide ahcerle justicia.
La perseverancia puede conseguir lo qeu parece imposible. Pero si eso lo ahcen los hambres injustos, como el juez, ¿qué no hará Dios, el más justo de todos los seres, cuando se pide con perseverancia?
Es esa perseverancia, divina y humana, lo que mantiene la fe en este mundo y en le Iglesia. Siempre Dios y el hombre.
Recopilación y comentario
P. Francisco Domingo
LA FE ES MAS FUERTE QUE LA MUERTE
La frase del profeta Habacuc: "El justo vivirá por su fe", fue citada por san Pablo como argumento fundamental en su carta a los Romanos. El Evangelio recoge la enseñanza de Jesus a sus discipulos sobre la actitud consecuente del creyente: un hombre de fe busca solo hacer la volundad de Dios.
La segunda carta a Timoteo recuerda el don del espiritu que éste recibió en su ordenación como sucesor de los Apóstoles; espíritu de gobierno y de fortaleza para mantener con fidelidad el tesoro de la fe cristiana.
Cuando hablamos de la fe es para vivirla en todas las circunstancias. Que dé sentido a la vida en las buenas yen las malas, en las cosas pequeñas, como la mostaza, o en las grandes como la curación de un cáncer, la fe es la razón de nacer, vivir y morir.
Es por eso que no puedo dejar de pasar el santo de hoy, domingo 03 de Octubre, San Francisco de Borja (1510 - 1572) que tanta fe tenía y que hizo de sus decisiones un ejemplo de fe para todos.
Fue Francisco algún tiempo paje en Tordesillas y, luego en Valladolidm caballerizo mayor de Carlos V y de la emperatriz Isabel. Fue Marquez de Lombay y Duque de Gandía.
En 1529, a los 19 años, se casó Francisco con Leonor, la camarera mayor de la emperatriz Isaebl, tuvo con Leonor nueve hijos.
El 01 de Mayo de 1539 moría en Toledo la emperatriz Isabel, la mujer más bella de su tiempo, según la pintura del pintor Ticiano. Francisco veló el cadáver inconsolable; pero la caducidad de las cosas humanas le hizo pensar.
El era un buen cristiano, ahora ha decidido entregarse totalmente a Dios. Francisco acompañó el cadáver de Isabel hasta Granada, antes de enterrarlo, hubo que abrir el féretro para certificar que aquel irreconocible rostro, despues de 18 días de viaje, pertenecía a la más bella emperatriz. entonces se dice que Francisco exclamó: "No quiero servir más a ninguna persona que se me pueda morir".
Francisco escribía en su diario: "Por la emperatriz, que murió tal día como hoy, por lo que el Señor obró en mí por su muerte, por los años que hoy se cumplen de mi conversión"...
Aquí tomó la decisión. realiza una gran labor social. Muere Leonor su amada esposa. Francisco tiene 36 años y 7 hijos.
¿Qué hacer?... Hace Ejercicios Espirituales para acertar en su futura vocación. Lleva una vida de profunda oración y mortificación, arregla los asuntos de sus hijos y de sus estados, renuncia a sus títulos. Entra en la Compañía de Jesús, estudia y es jesuita.
Marcha a Roma, se ordena sacerdote.
legará a ser el tercer general de los Jesuitas.
Supo vivir la fe, hoy es San Francisco de Borja.
La fe en Dios da sentido a todo el acontecer nuestro
La muerte de un ser querido no es para desesperar sino para preguntarnos sobre la existencia humana. Lo que es Dios y nosotros. Ek presente, el futuro y la eternidad. No es para asustarse sino todo lo contrario: confiar, esperar, servir, perdonar, pedir perdón, trabajar, ser honesto en todo, vivir como cristianos de fe.
Recopilación y comentario: P. Francisco Domingo
La segunda carta a Timoteo recuerda el don del espiritu que éste recibió en su ordenación como sucesor de los Apóstoles; espíritu de gobierno y de fortaleza para mantener con fidelidad el tesoro de la fe cristiana.
Cuando hablamos de la fe es para vivirla en todas las circunstancias. Que dé sentido a la vida en las buenas yen las malas, en las cosas pequeñas, como la mostaza, o en las grandes como la curación de un cáncer, la fe es la razón de nacer, vivir y morir.
Es por eso que no puedo dejar de pasar el santo de hoy, domingo 03 de Octubre, San Francisco de Borja (1510 - 1572) que tanta fe tenía y que hizo de sus decisiones un ejemplo de fe para todos.
Fue Francisco algún tiempo paje en Tordesillas y, luego en Valladolidm caballerizo mayor de Carlos V y de la emperatriz Isabel. Fue Marquez de Lombay y Duque de Gandía.
En 1529, a los 19 años, se casó Francisco con Leonor, la camarera mayor de la emperatriz Isaebl, tuvo con Leonor nueve hijos.
El 01 de Mayo de 1539 moría en Toledo la emperatriz Isabel, la mujer más bella de su tiempo, según la pintura del pintor Ticiano. Francisco veló el cadáver inconsolable; pero la caducidad de las cosas humanas le hizo pensar.
El era un buen cristiano, ahora ha decidido entregarse totalmente a Dios. Francisco acompañó el cadáver de Isabel hasta Granada, antes de enterrarlo, hubo que abrir el féretro para certificar que aquel irreconocible rostro, despues de 18 días de viaje, pertenecía a la más bella emperatriz. entonces se dice que Francisco exclamó: "No quiero servir más a ninguna persona que se me pueda morir".
Francisco escribía en su diario: "Por la emperatriz, que murió tal día como hoy, por lo que el Señor obró en mí por su muerte, por los años que hoy se cumplen de mi conversión"...
Aquí tomó la decisión. realiza una gran labor social. Muere Leonor su amada esposa. Francisco tiene 36 años y 7 hijos.
¿Qué hacer?... Hace Ejercicios Espirituales para acertar en su futura vocación. Lleva una vida de profunda oración y mortificación, arregla los asuntos de sus hijos y de sus estados, renuncia a sus títulos. Entra en la Compañía de Jesús, estudia y es jesuita.
Marcha a Roma, se ordena sacerdote.
legará a ser el tercer general de los Jesuitas.
Supo vivir la fe, hoy es San Francisco de Borja.
La fe en Dios da sentido a todo el acontecer nuestro
La muerte de un ser querido no es para desesperar sino para preguntarnos sobre la existencia humana. Lo que es Dios y nosotros. Ek presente, el futuro y la eternidad. No es para asustarse sino todo lo contrario: confiar, esperar, servir, perdonar, pedir perdón, trabajar, ser honesto en todo, vivir como cristianos de fe.
Recopilación y comentario: P. Francisco Domingo
NUESTRO DIOS NO ES EL DINERO
La palabra de Dios nos pone en guardia con el sin duda, Dios, con minúscula, del mundo moderno: el dinero, las cosas, lo material, la cuenta corriente, las posesiones, la riqueza en todas sus formas.
A pesar de que dicen que estamos muy avanzados, somos esclavos del orgullo, del dinero y la sensualidad. No somos ángeles pero tampoco esclavos ni hemos nacido solo para TENER a costa de todo. Una parte muy importante de los periódicos, de nuestros diálogos, de nuestras preocupaciones son sobre el poseer.
La primera lectura, tomada del profeta Amós, dirige una maldición contra los mercaderes y negociantes que no aceptan la religión que estorba a sus planes; quieren que pasen las fiestas sagradas, el sábado, día del Señor, para poder emprender su tarea financiera, y con ello, las injusticias que lleva la avaricia de los que son amantes-esclavos-enfermos del dinero.
“Amontonaos más bien tesoros en el cielo, donde no hay polilla ni herrumbre que corroan, ni ladrones que socaven y roben. Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón” (Mateo 6, 18-24)
Nadie puede servir a dos señores; porque aborrecerá a uno y amará al otro; o bien se entregará a uno y despreciará al otro.
NO PODÉIS SERVIR A DIOS Y AL DINERO.
Tal vez no es tan fácil vivir trabajando y ganando lo que es necesario y muy lícito para vivir con dignidad y no estar obsesionados por el pasado, el presente y el futuro de mis cuentas, finanzas, ahorros, ganancias, pérdidas, el futuro, las enfermedades, la ruina.
Hay que guardar pan para mayo sí, pero no como si hubiéramos nacido solo para eso.
Hay que añadir la injusticia del que más sabe con el ignorante, la mentira en el negocio, la falsificación de las normas de juego, la inteligencia que atropella al menos dotado. Hay muchos ricos con corbata pero debiera ser con un cadena al cuello al ver tanto inocente y pobre atropellado por la avaricia patológica de los amantes del dinero.
Así como hay hipocondríacos aterrados por su salud, hay también aterrados por ganar y ganar más todo el día. Aterrados por no ganar la cantidad que se han propuesto.
Un panadero quitaba unos gramos al pan francés cada día. El pan de los pobres, el alimento de los niños, el sustento de muchas familias, el soporte de los enfermos de tuberculosis… Y decía que era cristiano.
Después me enteré que no dormía bien. Al corazón no se le puede engañar. El insomnio es la consecuencia de lo podrido de su dinero. Si no se detiene de su crimen y no restituye, el Dios de los pobres seguro que será un juez implacable con él.
El dinero es necesario, pero vivir para él, es perderse a Dios, a la familia, a los buenos amigos, a la conciencia en paz, a dormir tranquilo. Las palabras de aquella mujer, que ayudaba a los demás sin tener lo necesario para ella, y trabajando siempre, es una lección maravillosa: mi seguro para el presente futuro no es el trabajo que no lo dejaré, mi seguro es Dios.
A pesar de que dicen que estamos muy avanzados, somos esclavos del orgullo, del dinero y la sensualidad. No somos ángeles pero tampoco esclavos ni hemos nacido solo para TENER a costa de todo. Una parte muy importante de los periódicos, de nuestros diálogos, de nuestras preocupaciones son sobre el poseer.
La primera lectura, tomada del profeta Amós, dirige una maldición contra los mercaderes y negociantes que no aceptan la religión que estorba a sus planes; quieren que pasen las fiestas sagradas, el sábado, día del Señor, para poder emprender su tarea financiera, y con ello, las injusticias que lleva la avaricia de los que son amantes-esclavos-enfermos del dinero.
“Amontonaos más bien tesoros en el cielo, donde no hay polilla ni herrumbre que corroan, ni ladrones que socaven y roben. Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón” (Mateo 6, 18-24)
Nadie puede servir a dos señores; porque aborrecerá a uno y amará al otro; o bien se entregará a uno y despreciará al otro.
NO PODÉIS SERVIR A DIOS Y AL DINERO.
Tal vez no es tan fácil vivir trabajando y ganando lo que es necesario y muy lícito para vivir con dignidad y no estar obsesionados por el pasado, el presente y el futuro de mis cuentas, finanzas, ahorros, ganancias, pérdidas, el futuro, las enfermedades, la ruina.
Hay que guardar pan para mayo sí, pero no como si hubiéramos nacido solo para eso.
Hay que añadir la injusticia del que más sabe con el ignorante, la mentira en el negocio, la falsificación de las normas de juego, la inteligencia que atropella al menos dotado. Hay muchos ricos con corbata pero debiera ser con un cadena al cuello al ver tanto inocente y pobre atropellado por la avaricia patológica de los amantes del dinero.
Así como hay hipocondríacos aterrados por su salud, hay también aterrados por ganar y ganar más todo el día. Aterrados por no ganar la cantidad que se han propuesto.
Un panadero quitaba unos gramos al pan francés cada día. El pan de los pobres, el alimento de los niños, el sustento de muchas familias, el soporte de los enfermos de tuberculosis… Y decía que era cristiano.
Después me enteré que no dormía bien. Al corazón no se le puede engañar. El insomnio es la consecuencia de lo podrido de su dinero. Si no se detiene de su crimen y no restituye, el Dios de los pobres seguro que será un juez implacable con él.
El dinero es necesario, pero vivir para él, es perderse a Dios, a la familia, a los buenos amigos, a la conciencia en paz, a dormir tranquilo. Las palabras de aquella mujer, que ayudaba a los demás sin tener lo necesario para ella, y trabajando siempre, es una lección maravillosa: mi seguro para el presente futuro no es el trabajo que no lo dejaré, mi seguro es Dios.
Recopilación y comentario P. DOMINGO
LA PARABOLA DE LOS DOS HIJOS PRODIGOS
En la parábola del Padre de los dos hijos pródigos, Lucas 15, 1-32, el hijo mayor que rechaza la bondad de su padre con el hijo pródigo, pintó Jesús a sus adversarios. "Las quejas del hijo, mayor, son el centro de la parábola”. En la respuesta del padre al hijo mayor, hay una lección de amor fraterno. No sólo debemos gozarnos de que Dios nos haya perdonado; también hemos de regocijarnos de que igualmente perdona a nuestros hermanos. Caridad, no envidia, comprensión, no miras interesadas y egoístas. El corazón del padre está muy encima del corazón del hermano... Y Dios es Padre. El hermano habla con la razón y el padre obra y habla con el corazón.
No juzguéis y no seréis juzgados. (Lc 6,36-38). El amor es comprensivo (1 Cor 13). Come con fariseos y publicanos. La Magdalena arrepentida, la preferida .Condenemos hechos, no personas. Antes del arrepentimiento Dios ha penetrado en las fibras del corazón: Tomar conciencia de pecado ya es una gracia, no nos engañemos y no queramos ver. Dios sacude inteligencia y corazón. Is. 54,7: Por un breve tiempo te abandoné, pero con gran ternura te acogí. En un arranque de furor te oculte mi rostro, pero con amor eterno te he compadecido.
El hijo menor es sanguíneo, espontáneo, libre, impulsivo, imprevisto apasionado, irresponsable, impresionable, noble, generoso, bueno, inconstante, más débil que malo, infantil e inmaduro. El pecado, como a Pedro, le hará madurar. Peca por loco más que por malo, pero peca. Hace sufrir por alocado, pero hace sufrir.
El hijo mayor es perfecto, derecho, exigente consigo y con los demás, trabajador, constante, justo, exactamente justo, no acepta medias tintas, las cosas para él son blancas o negras, no grises; actúa por deber, matemáticamente planifica su actuación, se puede contar con él, es responsable, tiene amigos, pero pocos y como él o dominados por él; es maduro, tiene en cuenta las fallas de los demás para no olvidarlas y exponerse; es fiel a los suyos, hasta cierto punto. Empuja la obra encomendada, si tienen faltas, procura no escandalizar; todo es, aparentemente, casi perfecto.
Si tiene todas esas cualidades, pero le falta el corazón y el Evangelio; pero no sabemos amar. Aroma de Evangelio, ternura, amor comprensivo; no sabe rezar el Padre nuestro, perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonarnos a nuestros deudores. No puede acoger a los que no son exactos o son débiles, o superficiales; no puede compartir con los de abajo porque les cree menos; y, con los de arriba, porque se muere de envidia... En realidad no sabe amar. El hijo mayor no sólo no es misericordioso, le molesta que los demás lo sean.
La gran enseñanza que nos la da la parábola, es que Dios es Padre. Decimos que Dios es nuestro Padre, y no nos llenamos de emoción. ¿Es verdad que Dios nos trae a la vida, y se llena de ternura con nosotros, y nos echa de menos cuando nos alejamos? ¿Es verdad que suspira por encontrarnos, que todos los días sale al camino para ver si en el horizonte al fin me ve a mí acercarme a su casa?
Dice San Agustín, ese hijo pródigo, hablando a Jesucrito: “Y Tú estabas dentro de mí y yo afuera, y así por fuera te buscaba; y, deforme como era, me lanzaba sobre estas cosas hermosas que Tú creaste. Tú estabas conmigo, mas yo no estaba contigo”.
Recopilación y comentario
P. DOMINGO
No juzguéis y no seréis juzgados. (Lc 6,36-38). El amor es comprensivo (1 Cor 13). Come con fariseos y publicanos. La Magdalena arrepentida, la preferida .Condenemos hechos, no personas. Antes del arrepentimiento Dios ha penetrado en las fibras del corazón: Tomar conciencia de pecado ya es una gracia, no nos engañemos y no queramos ver. Dios sacude inteligencia y corazón. Is. 54,7: Por un breve tiempo te abandoné, pero con gran ternura te acogí. En un arranque de furor te oculte mi rostro, pero con amor eterno te he compadecido.
El hijo menor es sanguíneo, espontáneo, libre, impulsivo, imprevisto apasionado, irresponsable, impresionable, noble, generoso, bueno, inconstante, más débil que malo, infantil e inmaduro. El pecado, como a Pedro, le hará madurar. Peca por loco más que por malo, pero peca. Hace sufrir por alocado, pero hace sufrir.
El hijo mayor es perfecto, derecho, exigente consigo y con los demás, trabajador, constante, justo, exactamente justo, no acepta medias tintas, las cosas para él son blancas o negras, no grises; actúa por deber, matemáticamente planifica su actuación, se puede contar con él, es responsable, tiene amigos, pero pocos y como él o dominados por él; es maduro, tiene en cuenta las fallas de los demás para no olvidarlas y exponerse; es fiel a los suyos, hasta cierto punto. Empuja la obra encomendada, si tienen faltas, procura no escandalizar; todo es, aparentemente, casi perfecto.
Si tiene todas esas cualidades, pero le falta el corazón y el Evangelio; pero no sabemos amar. Aroma de Evangelio, ternura, amor comprensivo; no sabe rezar el Padre nuestro, perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonarnos a nuestros deudores. No puede acoger a los que no son exactos o son débiles, o superficiales; no puede compartir con los de abajo porque les cree menos; y, con los de arriba, porque se muere de envidia... En realidad no sabe amar. El hijo mayor no sólo no es misericordioso, le molesta que los demás lo sean.
La gran enseñanza que nos la da la parábola, es que Dios es Padre. Decimos que Dios es nuestro Padre, y no nos llenamos de emoción. ¿Es verdad que Dios nos trae a la vida, y se llena de ternura con nosotros, y nos echa de menos cuando nos alejamos? ¿Es verdad que suspira por encontrarnos, que todos los días sale al camino para ver si en el horizonte al fin me ve a mí acercarme a su casa?
Dice San Agustín, ese hijo pródigo, hablando a Jesucrito: “Y Tú estabas dentro de mí y yo afuera, y así por fuera te buscaba; y, deforme como era, me lanzaba sobre estas cosas hermosas que Tú creaste. Tú estabas conmigo, mas yo no estaba contigo”.
Recopilación y comentario
P. DOMINGO
GRAN BINGO KERMESSE TOMBOLA 2010
El Bingo, kermesse, tómbola ..... no es solamente un pasatiempo, no es solamente un encuentro de la comunidad parroquial que sería suficiente razón. Tiene una mística, la primera es que Dios, la fe, los pobres, todo ello es el motivo principal. Además, lo que obtengamos será para hacer la nueva Sacristía (previo a lo sagrado), arreglar confesionarios, Caritas Parroquial y el Complejo Parroquial.
Son motivaciones más que suficientes para que la fiesta del día 5 de Septiembre haya sido "bella para Dios y agradable para los hombres", frase atribuida a la madre Teresa de Calcuta. En el fondo todo ha sido una gracia de Dios, que hemos vivido a plenitud.
COMPARTIENDO 57
El mes de septiembre nos trae dos celebraciones especiales. El mes de la Biblia por ser el día 30 la fiesta de San Jerónimo, que nos dio un ejemplo de amor a la Palabra, la Palabra de Dios escrita, y ya de bien mayor estudió el hebreo y el griego para poder traducir la Biblia a la lengua latina, que es lo que se hablaba en el mundo mediterráneo hacia el año 400 después de Cristo.
Sin palabra de Dios no hay fe, y si no hay fe todo el edificio sobrenatural, interior, espiritual se derrumbaría. Hemos vivido en realidad de la Biblia Vulgata, para el vulgo del 400 a 1965 en la Liturgia de la Iglesia y de lectura cotidiana de los sacerdotes.
Bastaría esa razón para hablar de los libros, y como se dividieron en capítulos y versículos, los distintos géneros literarios, como se debe leer, una buen guía, la lectio esa lectura llena de fe que se empapa e impregna de lo que Dios habla a través de su palabra en los 73 libros.
Todas las páginas y el tiempo que podamos dar a su lectura ya bucear en sus escritos será poco pero sin olvidar lo que nos dice Isaías: Y ¿en quién voy a fijarme? En el humilde y contrito que tiembla ante mi palabra. Los pobres tienen asegurada la comunicación con Dios.
La otra celebración es de San Vicente de Paúl. Un hombre, hombre, que pasando por épocas en que solo le preocupaba medrar, subir el estatus social, económico y político, a como diera lugar, incluso vendiendo un caballo alquilado, acepta los golpes de la vida.
Frecuenta buenas amistades de sacerdotes y laicos, lee magníficos libros de Benito de Canfield y San Francisco de Sales, los místicos españoles, dando el gran salto y definitivo a los 42 años. Se va convirtiendo del buen sacerdote Vicente de Paul a San Vicente de Paúl. Amigo de Dios, de los pobres y de los que sufren, amigo de todos los que quieran subirse a su carro para ayudar a los que menos tienen, menos saben, menos son en la sociedad, los que no tienen voz.
San Vicente de Paúl, nos enseña que no se pude amar a Dios si no se ama a los que sufren, a los pobres, a los desheredados. Hace voto de dedicarse de por vida a los pobres. Da todos sus ahorros, la mitad a su familia y la otra mitad un centro de beneficencia y se sintió libre para dedicar sus energias, experiencias y conocimientos a los Cristos encarnados, los sufrientes, que a pesar de sus apariencias son el mismo Cristo.
La mitad de su vida camina buscando éxitos sociales y económicos y la otra mitad amando a Dios y sirviéndole hasta su muerte en los excluidos de la sociedad.
Dios y su Palabra y el gran apóstol y patrono de la Caridad nos enseñan en estas páginas que este es el camino para llamamos y ser en realidad cristianos, seguidores de Cristo al estilo de San Vicente de Paúl.
P. Francisco Domingo CM.
Sin palabra de Dios no hay fe, y si no hay fe todo el edificio sobrenatural, interior, espiritual se derrumbaría. Hemos vivido en realidad de la Biblia Vulgata, para el vulgo del 400 a 1965 en la Liturgia de la Iglesia y de lectura cotidiana de los sacerdotes.
Bastaría esa razón para hablar de los libros, y como se dividieron en capítulos y versículos, los distintos géneros literarios, como se debe leer, una buen guía, la lectio esa lectura llena de fe que se empapa e impregna de lo que Dios habla a través de su palabra en los 73 libros.
Todas las páginas y el tiempo que podamos dar a su lectura ya bucear en sus escritos será poco pero sin olvidar lo que nos dice Isaías: Y ¿en quién voy a fijarme? En el humilde y contrito que tiembla ante mi palabra. Los pobres tienen asegurada la comunicación con Dios.
La otra celebración es de San Vicente de Paúl. Un hombre, hombre, que pasando por épocas en que solo le preocupaba medrar, subir el estatus social, económico y político, a como diera lugar, incluso vendiendo un caballo alquilado, acepta los golpes de la vida.
Frecuenta buenas amistades de sacerdotes y laicos, lee magníficos libros de Benito de Canfield y San Francisco de Sales, los místicos españoles, dando el gran salto y definitivo a los 42 años. Se va convirtiendo del buen sacerdote Vicente de Paul a San Vicente de Paúl. Amigo de Dios, de los pobres y de los que sufren, amigo de todos los que quieran subirse a su carro para ayudar a los que menos tienen, menos saben, menos son en la sociedad, los que no tienen voz.
San Vicente de Paúl, nos enseña que no se pude amar a Dios si no se ama a los que sufren, a los pobres, a los desheredados. Hace voto de dedicarse de por vida a los pobres. Da todos sus ahorros, la mitad a su familia y la otra mitad un centro de beneficencia y se sintió libre para dedicar sus energias, experiencias y conocimientos a los Cristos encarnados, los sufrientes, que a pesar de sus apariencias son el mismo Cristo.
La mitad de su vida camina buscando éxitos sociales y económicos y la otra mitad amando a Dios y sirviéndole hasta su muerte en los excluidos de la sociedad.
Dios y su Palabra y el gran apóstol y patrono de la Caridad nos enseñan en estas páginas que este es el camino para llamamos y ser en realidad cristianos, seguidores de Cristo al estilo de San Vicente de Paúl.
P. Francisco Domingo CM.
EL CAMINO DE SAN VICENTE SON LOS POBRES Parte I
Cuando Dios elige a una persona, Él mismo se encarga de mostrarle el camino. Vicente de Paúl se dejó "atrapar" por Dios, o mejor dicho, fueron los pobres los que le llevaron a Dios.
En sus años de juventud sus ideales no eran los de un amor generoso y desinteresado. Hijo de una familia campesina, el tercero de seis hermanos, vivió sus primeros años trabajando en las tareas del campo.
Su inteligencia despejada llevó a sus padres a proporcionarle unos estudios en el colegio de los Franciscanos de Dax, cuando tiene 19 años es ordenado sacerdote, tanto él como su familia lo que pretendían era encontrar un honroso retiro, pero los planes de Dios eran otros.
Tras unos años de conversión marcados por varias experiencias, buenas y no muy buenas, el encuentro con los pobres le hizo descubrir su verdadera vocación.
El año 1617 fue decisivo en su vida, tiene 36 años y dos acontecimientos
van a marcar su trayectoria. El encuentro con un anciano moribundo en Gannes y la situación de una familia muy pobre en Chatillón, donde él está de Párroco.
En estos acontecimientos descubre la llamada de Dios para poner en marcha sus grandes Obras de Caridad: Congregación Misión, Cofradías de la Caridad, Hijas de la Caridad ... A partir de este momento dedicará toda su vida al servicio y evangelización de los más pobres y abandonados "mis amos y señores", como él solía decir y "mi peso y mi dolor".
Siempre intentó estar donde había una necesidad: mendigos, niños abandonados, presos, campesinos arruinados por la guerra, enfermos pobres, soldados heridos, en países de misión etc.
Su doctrina y testimonio siguen siendo una voz que nos cuestiona: ''No basta con que yo ame a Dios si mi prójimo no le ama". "Amemos a Dios, pero que sea con el sudor de la frente y el cansancio de nuestros brazos" ...
La gran obra de Caridad llevada a cabo por Vicente de Paúl en favor de los más pobres, brota de un amor apasionado a Jesucristo. Él fue la regla de su vida y siempre trató de confrontar sus acciones con las de Cristo.
Para San Vicente la misericordia de Dios con los pobres se manifiesta en los pequeños gestos de servicio hechos con amor, delicadeza y alegría.
Por: Sonia Encinas
En sus años de juventud sus ideales no eran los de un amor generoso y desinteresado. Hijo de una familia campesina, el tercero de seis hermanos, vivió sus primeros años trabajando en las tareas del campo.
Su inteligencia despejada llevó a sus padres a proporcionarle unos estudios en el colegio de los Franciscanos de Dax, cuando tiene 19 años es ordenado sacerdote, tanto él como su familia lo que pretendían era encontrar un honroso retiro, pero los planes de Dios eran otros.
Tras unos años de conversión marcados por varias experiencias, buenas y no muy buenas, el encuentro con los pobres le hizo descubrir su verdadera vocación.
El año 1617 fue decisivo en su vida, tiene 36 años y dos acontecimientos
van a marcar su trayectoria. El encuentro con un anciano moribundo en Gannes y la situación de una familia muy pobre en Chatillón, donde él está de Párroco.
En estos acontecimientos descubre la llamada de Dios para poner en marcha sus grandes Obras de Caridad: Congregación Misión, Cofradías de la Caridad, Hijas de la Caridad ... A partir de este momento dedicará toda su vida al servicio y evangelización de los más pobres y abandonados "mis amos y señores", como él solía decir y "mi peso y mi dolor".
Siempre intentó estar donde había una necesidad: mendigos, niños abandonados, presos, campesinos arruinados por la guerra, enfermos pobres, soldados heridos, en países de misión etc.
Su doctrina y testimonio siguen siendo una voz que nos cuestiona: ''No basta con que yo ame a Dios si mi prójimo no le ama". "Amemos a Dios, pero que sea con el sudor de la frente y el cansancio de nuestros brazos" ...
La gran obra de Caridad llevada a cabo por Vicente de Paúl en favor de los más pobres, brota de un amor apasionado a Jesucristo. Él fue la regla de su vida y siempre trató de confrontar sus acciones con las de Cristo.
Para San Vicente la misericordia de Dios con los pobres se manifiesta en los pequeños gestos de servicio hechos con amor, delicadeza y alegría.
Por: Sonia Encinas
EL CAMINO DE SAN VICENTE SON LOS POBRES Parte II
Es admirable un párrafo del Reglamento de Chatillón en lo referente a la manera de asistir a los enfermos: "Preparará los alimentos, se los llevará a los enfermos, les saludará con alegría y caridad, acomodará la mesita sobre la cama, pondrá encima un mantel, un vaso, la cuchara y pan, hará lavar las manos del enfermo y rezará el Benedicite, echará el potaje en una escudilla y pondrá la carne en un plato ... luego invitará al enfermo a comer, por amor de Dios, que considera hecho a sí mismo el bien que se le hace a los pobres". (T. X, 578-79).
San Vicente, descubre en el rostro de los pobres la llamada insistente de Dios que le mueve a remediar sus necesidades.
UN HECHO ANECDÓTICO
San Vicente caminaba muy agachadito y un día por la calle no vio a un hombre que venía en dirección contraria y le dio un cabezazo.
El otro le dio un terrible bofetón. El santo se arrodilló y le pidió perdón por aquella su falta involuntaria. El agresor averiguó quien era ese sacerdote y al día siguiente por la mañana estuvo en la capilla donde el santo celebraba Misa y le pidió perdón llorando, y en adelante fue siempre su gran amigo. Se ganó esta amistad con su humildad y paciencia.
Siempre vestía muy pobremente, y cuando le querían tributar honores, exclamaba: "Yo soy un pobre pastorcito de ovejas, que dejé el campo para venírme a la ciudad, pero sigo siendo siempre un campesino simplón y
ordinario" ....
En sus últimos años su salud estaba muy deteriorada, pero no por eso dej aba de inventar y dirigir nuevas y numerosas obras de caridad. Lo que más le conmovía era que la gente no amaba a Dios. Exclamaba: "No es suficiente que yo ame a Dios. Es necesario hacer que mis prójimos lo amen también" ...
El 27 de septiembre de 1660 pasó a la eternidad a recibir el premio prometido por Dios a quienes se dedican a amar y hacer el bien a los demás. Tenía 80 años.
El Santo Padre León XIII proclamó a este sencillo campesino como Patrono de todas las asociaciones católicas de caridad.
"Jesucristo y los Pobres, Jesucristo en los pobres y los Pobres en Jesucristo" S.V.P.
Por : Sonia Encinas
HUMILDAD A LO JESUCRISTO
Jesús nos invita en el Evangelio de hoya la humildad. Decía un amigo mío: la humildad se fue de vacaciones y no ha vuelto.
Humillarse es más aceptable y no que humillen a uno.
A nadie le gusta que le pisen el poncho. También se dice que es más fácil comerse una humita que humillarse. Jesús nos dio un maravilloso ejemplo de humildad en el lavatorio de los pies a los discípulos y sobre todo a Judas. Se puso de rodillas ante los doce.
San Benito cuando reunió a los monjes dispersos hacia el año 530 se dio cuenta que era más sencillo vivir solo que juntos. Vivir varios no siempre es cómodo por el horario, la forma de ser del otro.
A uno le gusta frío a otro caliente, a uno el sol a otro la sombra. No somos contrarios pero somos distintos. Es por eso que San Benito de Nursia, no de Palermo, puso 12 grados de humildad para la convivencia pacífica de los monjes en el monasterio.
Voy a extraer algunos de los que él dice junto con algunos textos de la Escritura que nos sirven a todos. Pero todo es aplicable para la vida familiar y laboral del laico.
Mateo 11,29... "Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. Mateo 23,12 ... "Todo el que se ensalza será humillado y el que se humilla será ensalzado". Lucas 1,51 - 52 ... "Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón.
Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes. Proverbios 8,13. " ... Yo aborrezco la soberbia y la arrogancia y el camino malo y la boca torcida". "y se humilló a sí mismo, obedeciendo hasta la muerte y muerte de cruz". Filipenses 2,8.
Nos dice San Benito: "La humildad con siste en que uno tenga siempre delante de los ojos el temor de Dios, y nunca lo olvide. Recuerde, pues, continuamente todo lo que Dios ha mandado, y medite sin cesar en su alma cómo el infierno abrasa, a causa de sus pecados, a aquellos que desprecian a Dios, y cómo la vida eterna está preparada para los que temen a Dios.
También consiste en que uno no ame su propia voluntad, ni se complazca en hacer sus gustos, sino que imite con hechos al Señor que dice: "No vine a hacer mi voluntad sino la de Aquel que me envió" (Jn. 6, 38). Finalmente recuerda San Benito: Que no sólo tenga humildad en su corazón, sino que la
demuestre siempre a cuan tos lo vean, aun con su propio cuerpo, en la oración y el canto en la iglesia, 'en el oratorio, sentado, andando o parado, esté siempre sumiso ... y creyéndose en todo mom ento reo por sus pecados.
Y diga siempre en su corazón lo que decía aquel publicano del Evangelio con los ojos fijos en la tierra: "Señor, no soy digno yo, pecador, de levantar mis ojos al cielo". (Le. 18,13).
No hace falta inclinar la cabeza todo el día para ser humilde, pero atropellar a los demás, imponerse siempre y a todos, sentirse juez de los demás, buscar el primer puesto en todo, nos hace mal. El mejor motivo para ser humilde es la imitación de Jesucristo y de la Virgen, eso nos basta.
"Humilde es aquel con quien todos se encuentran bien. Hasta Dios, se encuentra a gusto"
Por: P. Francisco Domingo
Humillarse es más aceptable y no que humillen a uno.
A nadie le gusta que le pisen el poncho. También se dice que es más fácil comerse una humita que humillarse. Jesús nos dio un maravilloso ejemplo de humildad en el lavatorio de los pies a los discípulos y sobre todo a Judas. Se puso de rodillas ante los doce.
San Benito cuando reunió a los monjes dispersos hacia el año 530 se dio cuenta que era más sencillo vivir solo que juntos. Vivir varios no siempre es cómodo por el horario, la forma de ser del otro.
A uno le gusta frío a otro caliente, a uno el sol a otro la sombra. No somos contrarios pero somos distintos. Es por eso que San Benito de Nursia, no de Palermo, puso 12 grados de humildad para la convivencia pacífica de los monjes en el monasterio.
Voy a extraer algunos de los que él dice junto con algunos textos de la Escritura que nos sirven a todos. Pero todo es aplicable para la vida familiar y laboral del laico.
Mateo 11,29... "Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. Mateo 23,12 ... "Todo el que se ensalza será humillado y el que se humilla será ensalzado". Lucas 1,51 - 52 ... "Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón.
Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes. Proverbios 8,13. " ... Yo aborrezco la soberbia y la arrogancia y el camino malo y la boca torcida". "y se humilló a sí mismo, obedeciendo hasta la muerte y muerte de cruz". Filipenses 2,8.
Nos dice San Benito: "La humildad con siste en que uno tenga siempre delante de los ojos el temor de Dios, y nunca lo olvide. Recuerde, pues, continuamente todo lo que Dios ha mandado, y medite sin cesar en su alma cómo el infierno abrasa, a causa de sus pecados, a aquellos que desprecian a Dios, y cómo la vida eterna está preparada para los que temen a Dios.
También consiste en que uno no ame su propia voluntad, ni se complazca en hacer sus gustos, sino que imite con hechos al Señor que dice: "No vine a hacer mi voluntad sino la de Aquel que me envió" (Jn. 6, 38). Finalmente recuerda San Benito: Que no sólo tenga humildad en su corazón, sino que la
demuestre siempre a cuan tos lo vean, aun con su propio cuerpo, en la oración y el canto en la iglesia, 'en el oratorio, sentado, andando o parado, esté siempre sumiso ... y creyéndose en todo mom ento reo por sus pecados.
Y diga siempre en su corazón lo que decía aquel publicano del Evangelio con los ojos fijos en la tierra: "Señor, no soy digno yo, pecador, de levantar mis ojos al cielo". (Le. 18,13).
No hace falta inclinar la cabeza todo el día para ser humilde, pero atropellar a los demás, imponerse siempre y a todos, sentirse juez de los demás, buscar el primer puesto en todo, nos hace mal. El mejor motivo para ser humilde es la imitación de Jesucristo y de la Virgen, eso nos basta.
"Humilde es aquel con quien todos se encuentran bien. Hasta Dios, se encuentra a gusto"
Por: P. Francisco Domingo
LA POBREZA Y LA PALABRA DE DIOS
SIN DUDA LA POBREZA ES RELATIVA Y SE MIDE DE DIFERENTES FORMAS.
El Día Mundial para la Erradicación de la pobreza se celebra el 17 de octubre. "Creado a imagen y semejanza de Dios, el hombre es el señor y el centro de toda la creación de donde se derivan la dignidad y los derechos de la persona humana. Como dice el Vaticano 11, "todos los bienes de la tierra deben ordenarse en función del hombre, centro y cima de todos ellos" (GS. 12).
Por eso toda la organización de la sociedad, la cultura, la economía y la política deben estar al servicio de la dignidad y los derechos del hombre, tanto considerado en su individualidad como en sus formas de vida comunitaria. La sociedad al servicio de los Derechos Humanos.
La definición de pobreza exige el análisis previo de la situación socioeconómica general de cada área o región, y de los patrones culturales que expresan el estilo de vida dominante en ella.
Por ejemplo para un habitante de un país desarrollado ser pobre tal vez significa no tener automóvil, casa de verano, etcétera, mientras que en un país no desarrollado, en vías de desarrollo o subdesarrollado, signifique no tener que comer, vestir o con que curarse. Sin embargo, en sus respectivas sociedades, ambos son pobres, porque pertenecen al escalón más bajo de la distribución del ingreso.
Un autor economista citó "podemos adoptar como concepto de pobreza el que alude a la insatisfacción de un conjunto de necesidades consideradas esenciales por un grupo social específico y que reflejan el estilo de vida de esta sociedad"; y tenemos que aceptar que estaba en lo cierto.
Entonces podemos decir que las características de la pobreza son sus
mismas cualidades intrínsecas y va arraigada y sujeta a la falta de uno u
- otro renglón socio-económico:
1) Falta de Salud.
2) Falta de Vivienda.
3) Falta de Ingresos.
4) Falta de Empleo.
5) Falta de Agricultura estable.
6) Falta de Nutrición.
7) Falta de Tecnología.
8) Falta de Educación.
9) Mortalidad infantil.
10) Sin acceso a la educación.
11) Sin acceso a curarse.
12) Sin vestidos adecuados.
Dios no quiere la pobreza en esta medida que aquí se describe. Dice el
libro de los Proverbios 30, 8 Y 9...
"Señor no me des pobreza ni rtqueza, déjame gustar mi bocado de pan, no sea
que llegue a hartarme y reniegue, y diga: « ¿Quién es Yahveh? », O no sea
que, siendo pobre, me dé al robo ... "; no es bueno tener mucho mucho, nos olvidamos de Dios, ni tan poco que reneguemos de Él, es mejor lo necesario para vivir con dignidad, y con eltrabajo de nuestras manos.
Por: Magaly Castillo
El Día Mundial para la Erradicación de la pobreza se celebra el 17 de octubre. "Creado a imagen y semejanza de Dios, el hombre es el señor y el centro de toda la creación de donde se derivan la dignidad y los derechos de la persona humana. Como dice el Vaticano 11, "todos los bienes de la tierra deben ordenarse en función del hombre, centro y cima de todos ellos" (GS. 12).
Por eso toda la organización de la sociedad, la cultura, la economía y la política deben estar al servicio de la dignidad y los derechos del hombre, tanto considerado en su individualidad como en sus formas de vida comunitaria. La sociedad al servicio de los Derechos Humanos.
La definición de pobreza exige el análisis previo de la situación socioeconómica general de cada área o región, y de los patrones culturales que expresan el estilo de vida dominante en ella.
Por ejemplo para un habitante de un país desarrollado ser pobre tal vez significa no tener automóvil, casa de verano, etcétera, mientras que en un país no desarrollado, en vías de desarrollo o subdesarrollado, signifique no tener que comer, vestir o con que curarse. Sin embargo, en sus respectivas sociedades, ambos son pobres, porque pertenecen al escalón más bajo de la distribución del ingreso.
Un autor economista citó "podemos adoptar como concepto de pobreza el que alude a la insatisfacción de un conjunto de necesidades consideradas esenciales por un grupo social específico y que reflejan el estilo de vida de esta sociedad"; y tenemos que aceptar que estaba en lo cierto.
Entonces podemos decir que las características de la pobreza son sus
mismas cualidades intrínsecas y va arraigada y sujeta a la falta de uno u
- otro renglón socio-económico:
1) Falta de Salud.
2) Falta de Vivienda.
3) Falta de Ingresos.
4) Falta de Empleo.
5) Falta de Agricultura estable.
6) Falta de Nutrición.
7) Falta de Tecnología.
8) Falta de Educación.
9) Mortalidad infantil.
10) Sin acceso a la educación.
11) Sin acceso a curarse.
12) Sin vestidos adecuados.
Dios no quiere la pobreza en esta medida que aquí se describe. Dice el
libro de los Proverbios 30, 8 Y 9...
"Señor no me des pobreza ni rtqueza, déjame gustar mi bocado de pan, no sea
que llegue a hartarme y reniegue, y diga: « ¿Quién es Yahveh? », O no sea
que, siendo pobre, me dé al robo ... "; no es bueno tener mucho mucho, nos olvidamos de Dios, ni tan poco que reneguemos de Él, es mejor lo necesario para vivir con dignidad, y con eltrabajo de nuestras manos.
Por: Magaly Castillo
Frédéric Antoine Ozanam
Frédéric Antoine Ozanam (* 1813 - 1853) fue un laico y político católico francés, nacido el 23 de abril de 1813 y fallecido en Marsella el 08 de septiembre de 1853, de fe viva y profunda, esposo y padre ejemplar. Profesor en la Sorbona. Murió a los 40 años.
En 1833 para evangelizar en contacto con los necesitados, crea con otros jóvenes: "Las Conferencias de San Vicente de Paul" al servicio de los pobres.
Su Himno al Señor es un maravilloso adiós a la vida terrestre, último acto de fe, amor y esperanza, que se abre a la luz de la eternidad.
"Es el comienzo del cántico de Ezequias: No sé si Dios permitirá que yo pueda apropiarme del fin. Sé que cumplo hoy mis 40 años, más de la mitad del camino de la vida. Sé que tengo una mujer joven y bien amada, una hija encantadora, excelentes hermanos, una segunda madre, muchos amigos, una
carrera honorable, trabajos conducidos a un punto en que podrían servir de fundamento a una obra siempre soñada. Sin embargo, estoy aquí aquejado de un mal grave, pertinaz y cada vez más peligroso ya que esconde probablemente un agotamiento completo.
¿ Es pues necesario, dejar todos estos bienes, que tú mismo Dios mío, me has dado? ¿No queréis, Señor, contentaros con u na parte del sacrificio? ¿ Cuál de ellos deseas que te inmole entre mis afectos desordenados? ¿No aceptarías el holocausto de mi amor propio literario, de mis ambiciones académicas, de mis proyectos de estudio en los que tal vez se mezclaba más orgullo que celo por la verdad?
Si vendiese la mitad de mis libros para dar el importe a los pobres y,
limitándome a cumplir los deberes de mi estado, consagrara el resto de mi vida a visitar a los indigentes, a instruir a los aprendices y a los soldados, Señor, ¿estarías satisfecho, y me dejarías la dulzura de envejecer cerca de mi mujer y completar la educación de mi hija? ¿ Tal vez, Señor, no lo quieres? No aceptas estas ofrendas interesadas, desechas mis holocaustos y mis sacrificios. Soy yo mismo a quien pides.
Está escrito en el comienzo del libro que debo hacer vuestra voluntad y he dicho: Vengo, Señor. Vengo si tú me llamas y no tengo derecho a quejarme. Me has dado 40 años de vida. Si yo repaso ante ti mis años con amargura, es a causa de los pecados con los que los he manchado; pero cuando considero las gracias con las que me has enriquecido, evoco mis años ante ti, Señor, con agradecimiento.
Cuando me encadenes a una cama, los días que me restan de vida no bastarán para agradecerte los días que he vivido.
¡Ah! Si estas páginas son las últimas que escribo, que sean un himno a vuestra bondad. /1 (Muere a los 4 meses).
Pisa, 23 de Abril de 1853, el día de sus 40 años. Federico Ozanam.
En 1833 para evangelizar en contacto con los necesitados, crea con otros jóvenes: "Las Conferencias de San Vicente de Paul" al servicio de los pobres.
Su Himno al Señor es un maravilloso adiós a la vida terrestre, último acto de fe, amor y esperanza, que se abre a la luz de la eternidad.
HIMNO AL SEÑOR
"Es el comienzo del cántico de Ezequias: No sé si Dios permitirá que yo pueda apropiarme del fin. Sé que cumplo hoy mis 40 años, más de la mitad del camino de la vida. Sé que tengo una mujer joven y bien amada, una hija encantadora, excelentes hermanos, una segunda madre, muchos amigos, una
carrera honorable, trabajos conducidos a un punto en que podrían servir de fundamento a una obra siempre soñada. Sin embargo, estoy aquí aquejado de un mal grave, pertinaz y cada vez más peligroso ya que esconde probablemente un agotamiento completo.
¿ Es pues necesario, dejar todos estos bienes, que tú mismo Dios mío, me has dado? ¿No queréis, Señor, contentaros con u na parte del sacrificio? ¿ Cuál de ellos deseas que te inmole entre mis afectos desordenados? ¿No aceptarías el holocausto de mi amor propio literario, de mis ambiciones académicas, de mis proyectos de estudio en los que tal vez se mezclaba más orgullo que celo por la verdad?
Si vendiese la mitad de mis libros para dar el importe a los pobres y,
limitándome a cumplir los deberes de mi estado, consagrara el resto de mi vida a visitar a los indigentes, a instruir a los aprendices y a los soldados, Señor, ¿estarías satisfecho, y me dejarías la dulzura de envejecer cerca de mi mujer y completar la educación de mi hija? ¿ Tal vez, Señor, no lo quieres? No aceptas estas ofrendas interesadas, desechas mis holocaustos y mis sacrificios. Soy yo mismo a quien pides.
Está escrito en el comienzo del libro que debo hacer vuestra voluntad y he dicho: Vengo, Señor. Vengo si tú me llamas y no tengo derecho a quejarme. Me has dado 40 años de vida. Si yo repaso ante ti mis años con amargura, es a causa de los pecados con los que los he manchado; pero cuando considero las gracias con las que me has enriquecido, evoco mis años ante ti, Señor, con agradecimiento.
Cuando me encadenes a una cama, los días que me restan de vida no bastarán para agradecerte los días que he vivido.
¡Ah! Si estas páginas son las últimas que escribo, que sean un himno a vuestra bondad. /1 (Muere a los 4 meses).
Pisa, 23 de Abril de 1853, el día de sus 40 años. Federico Ozanam.
LA LECTIO (Lectura) DIVINA
I LECTURA ORANTE DE LA PALABRA DE DIOS.
1. Lectura piadosa y orante, personal y dialogal de la Palabra de Dios.
2. Es un camino a través del cual avanzamos vivencialmente hacia una meta. Camino y meta son Cristo.
3. Una atención particular a la palabra revelada y a aquel que nos habla en
ella, el mismo Dios.
4. Su cualificación de «divina" indica que la Lectio tiene como objeto la
Palabra de Dios y que se hace en la presencia del Dios vivo, bajo la acción
de su gracia.
5. Supone una relación con el Padre que nos habla en su Verbo y con el
Espíritu que es el maestro y el exégeta de la Escritura, en comunión con toda la Iglesia.
6. Los Padres de la Iglesia, dicen que la Lectio supone escuchar y responder. «Si rezas, eres tú el que hablas a DIOS; si lees, es DIOS el que te habla"
II REQUISITOS: Leer bien y orar bien.
III PASOS A SEGUIR:
1. LECTIO: Que dice el texto.
«La lectio es un estudio detenido de las Escrituras realizado con un espíritu de fe y totalmente esforzado en comprender.
2. MEDITATIO: Que me dice el texto.
La meditatio es una actividad de la inteligencia que con la ayuda de la razón busca la verdad escondida en Dios.
3. ORATIO: Que me hace decir el texto.
La oratio es un dirigir el corazón a Dios con el intenso deseo de evitar el mal, conseguir el bien para agradarle.
4. CONTEMPLATIO: Que me hace hacer el texto.
La contemplatio es una elevación del alma por encima de sí misma, permaneciendo como suspensa en Dios y saboreando los gozos de la dulzura
eterna ...
IV A LA CONTEMPLACIÓN EN LA VIDA SIGUEN:
5. LA CONSOLACIÓN,
6. EL DISCERNIMIENTO,
7. LA DECISIÓN,
8. LA ACCIÓN CONCRETA EN FAVOR DE LOS HERMANOS.
La Lectio divina recobra de este modo su linfa vital: orar y vivir la Palabra de Dios, Palabra de vida.
La lectura busca la dulzura de la vida bienaventurada, la meditación la encuentra, la oración la pide y la contemplación la experimenta.
1°. Leer es revivír el texto.
2º. Leer bien es resucitar el texto.
3°. Leer con inteligencia es sabiduría vital.
4°. No hay que olvidar que la Biblia es una revelación progresiva.
5°. y ¿en quién voy a fijarme? En el humilde y contrito que tiembla ante mi
palabra.
1. Lectura piadosa y orante, personal y dialogal de la Palabra de Dios.
2. Es un camino a través del cual avanzamos vivencialmente hacia una meta. Camino y meta son Cristo.
3. Una atención particular a la palabra revelada y a aquel que nos habla en
ella, el mismo Dios.
4. Su cualificación de «divina" indica que la Lectio tiene como objeto la
Palabra de Dios y que se hace en la presencia del Dios vivo, bajo la acción
de su gracia.
5. Supone una relación con el Padre que nos habla en su Verbo y con el
Espíritu que es el maestro y el exégeta de la Escritura, en comunión con toda la Iglesia.
6. Los Padres de la Iglesia, dicen que la Lectio supone escuchar y responder. «Si rezas, eres tú el que hablas a DIOS; si lees, es DIOS el que te habla"
II REQUISITOS: Leer bien y orar bien.
III PASOS A SEGUIR:
1. LECTIO: Que dice el texto.
«La lectio es un estudio detenido de las Escrituras realizado con un espíritu de fe y totalmente esforzado en comprender.
2. MEDITATIO: Que me dice el texto.
La meditatio es una actividad de la inteligencia que con la ayuda de la razón busca la verdad escondida en Dios.
3. ORATIO: Que me hace decir el texto.
La oratio es un dirigir el corazón a Dios con el intenso deseo de evitar el mal, conseguir el bien para agradarle.
4. CONTEMPLATIO: Que me hace hacer el texto.
La contemplatio es una elevación del alma por encima de sí misma, permaneciendo como suspensa en Dios y saboreando los gozos de la dulzura
eterna ...
IV A LA CONTEMPLACIÓN EN LA VIDA SIGUEN:
5. LA CONSOLACIÓN,
6. EL DISCERNIMIENTO,
7. LA DECISIÓN,
8. LA ACCIÓN CONCRETA EN FAVOR DE LOS HERMANOS.
La Lectio divina recobra de este modo su linfa vital: orar y vivir la Palabra de Dios, Palabra de vida.
La lectura busca la dulzura de la vida bienaventurada, la meditación la encuentra, la oración la pide y la contemplación la experimenta.
1°. Leer es revivír el texto.
2º. Leer bien es resucitar el texto.
3°. Leer con inteligencia es sabiduría vital.
4°. No hay que olvidar que la Biblia es una revelación progresiva.
5°. y ¿en quién voy a fijarme? En el humilde y contrito que tiembla ante mi
palabra.
GUÍA DE LECTURA DE LA BIBLIA CATÓLICA
1. LOS CUATRO SENTIDOS DE LA ESCRITURA
1. El sen tido literal: El significado transmitido por las palabras reales.
2. El sentido alegórico: el significado de los acontecimientos bíblicos que se refieren a Jesucristo. "Así, el cruce del Mar Rojo es un signo de la victoria de Cristo y del bautismo cristiano" (CIC 117, con referencia alCor. 10:2).
3. El sentido moral: la forma en que los acontecimientos nos muestran la forma de actuar como cristianos. Por ejemplo, la historia de la viuda que dio dos monedas de cobre mientras que los hombres ricos dieron un montón de
dinero del tesoro (Lucas 21:1-4) nos muestra a dar lo que tenemos y no sólo
lo que nos sobra.
4. El sentido espiritu al o mística: "Podemos ver realidades y acontecimientos en términos de su significación eterna, que nos conduce
hacia nuestra verdadera patria: así, la Iglesia en la tierra es un signo de la Jerusalén celestial" (CIC 117).
2. LOS TIPOS DE LOS LIBROS
Al leer la Biblia, es importante entender el tipo de escritura. Por ejemplo, Levítico es un libro de la ley. Los Salmos son una compilación de poesía y canciones. Para interpretar correctamente la Escritura, el lector debe estar atento a lo que los autores humanos de verdad querían afirmar y lo que Dios quería revelar a nosotros por sus palabras. (CIC 117)
3. MALENTENDIDOS
El primer libro del Antiguo Testamento, Génesis, tiene por objeto instruir al lector sobre la relación de Dios y los seres humanos y los orígenes del pueblo de Israel. Asimismo, aunque mucha gente cree que el último libro del Nuevo Testamento, el Apocalipsis, es una profecía del fin del mundo, fue escrito en realidad para animar a los cristianos en tiempos de
persecución, mostrando que Jesucristo y su Iglesia seria n los determinantes.
4. CON EL FIN DE INTERPRETAR CORRECT AMENTE LA BIBLIA, ES IMPORTANTE:
1. Prestar una gran atención al contenido y a la unidad de toda la Escritura. Esto quiere decir que la Escritura se unifica en su conjunto y no se contradice.
2. Para leer la Escritura en la Tradición viva de toda la Iglesia.
El Espíritu Santo en el cristianismo pasa a través de la escritura (es decir, la Biblia) y a través de la Tradición, (es decir, la vida litúrgica, costumbres, prácticas e instituciones que expresan la fe).
3. Para estar atento a la analogía de la fe.
Las verdades de la fe de ben estar de acuerdo entre ellas y entre todo el plan de la revelación.
Pero no hay que tener miedo a la palabra de Dios. Dios sin duda se descubre a los humildes que no tienen oportunidades de estudiar o acudir a quien les enseñe. Si el corazón se abre aunque no sea un experto en Sagrada
Escritura dice Dios: Mateo 11,25: "Yo te alabo, Padre, Señor del Cielo y de la tierra, porque has mantenido ocultas estas cosas a los sabios y entendidos y las has revelado a la gente sencilla. Sí, Padre, pues así fue de tu agrado." y en Isaías 66:2, Y ¿en quién voy a fijarme?
En el humilde y contrito que tiembla a mi palabra.
5. DISTINTAS TRADUCCIONES O VERSIONES DE LA BIBLIA
Si es católica dice (en latín, "imprimatur") indica la aprobación de un obispo o autoridad católica. Y "nihil obstat" (del latin, "nada impide") indica que no hay error.
Por: K. Brestovansky
1. El sen tido literal: El significado transmitido por las palabras reales.
2. El sentido alegórico: el significado de los acontecimientos bíblicos que se refieren a Jesucristo. "Así, el cruce del Mar Rojo es un signo de la victoria de Cristo y del bautismo cristiano" (CIC 117, con referencia alCor. 10:2).
3. El sentido moral: la forma en que los acontecimientos nos muestran la forma de actuar como cristianos. Por ejemplo, la historia de la viuda que dio dos monedas de cobre mientras que los hombres ricos dieron un montón de
dinero del tesoro (Lucas 21:1-4) nos muestra a dar lo que tenemos y no sólo
lo que nos sobra.
4. El sentido espiritu al o mística: "Podemos ver realidades y acontecimientos en términos de su significación eterna, que nos conduce
hacia nuestra verdadera patria: así, la Iglesia en la tierra es un signo de la Jerusalén celestial" (CIC 117).
2. LOS TIPOS DE LOS LIBROS
Al leer la Biblia, es importante entender el tipo de escritura. Por ejemplo, Levítico es un libro de la ley. Los Salmos son una compilación de poesía y canciones. Para interpretar correctamente la Escritura, el lector debe estar atento a lo que los autores humanos de verdad querían afirmar y lo que Dios quería revelar a nosotros por sus palabras. (CIC 117)
3. MALENTENDIDOS
El primer libro del Antiguo Testamento, Génesis, tiene por objeto instruir al lector sobre la relación de Dios y los seres humanos y los orígenes del pueblo de Israel. Asimismo, aunque mucha gente cree que el último libro del Nuevo Testamento, el Apocalipsis, es una profecía del fin del mundo, fue escrito en realidad para animar a los cristianos en tiempos de
persecución, mostrando que Jesucristo y su Iglesia seria n los determinantes.
4. CON EL FIN DE INTERPRETAR CORRECT AMENTE LA BIBLIA, ES IMPORTANTE:
1. Prestar una gran atención al contenido y a la unidad de toda la Escritura. Esto quiere decir que la Escritura se unifica en su conjunto y no se contradice.
2. Para leer la Escritura en la Tradición viva de toda la Iglesia.
El Espíritu Santo en el cristianismo pasa a través de la escritura (es decir, la Biblia) y a través de la Tradición, (es decir, la vida litúrgica, costumbres, prácticas e instituciones que expresan la fe).
3. Para estar atento a la analogía de la fe.
Las verdades de la fe de ben estar de acuerdo entre ellas y entre todo el plan de la revelación.
Pero no hay que tener miedo a la palabra de Dios. Dios sin duda se descubre a los humildes que no tienen oportunidades de estudiar o acudir a quien les enseñe. Si el corazón se abre aunque no sea un experto en Sagrada
Escritura dice Dios: Mateo 11,25: "Yo te alabo, Padre, Señor del Cielo y de la tierra, porque has mantenido ocultas estas cosas a los sabios y entendidos y las has revelado a la gente sencilla. Sí, Padre, pues así fue de tu agrado." y en Isaías 66:2, Y ¿en quién voy a fijarme?
En el humilde y contrito que tiembla a mi palabra.
5. DISTINTAS TRADUCCIONES O VERSIONES DE LA BIBLIA
Si es católica dice (en latín, "imprimatur") indica la aprobación de un obispo o autoridad católica. Y "nihil obstat" (del latin, "nada impide") indica que no hay error.
Por: K. Brestovansky
SAN VICENTE DE PAUL Y LOS NIÑOS EXPOSITOS (abandonados) I Parte
Es muy conocida la gran obra caritativa de San Vicente de Paúl, Fundador de la Congregación de la Misión (padres Vicentinos) y de las Hijas de la Caridad. Hoy, compartiré con ustedes una de las obras tan conmovedoras y audaces de este genio de la caridad.
"Las obras de Dios tienen su momento, es entonces cuando su Providencia las lleva a cabo y no antes, ni después", estas son palabras de Vicente de Paúl que nos enseñan a descu brir el paso de Dios en nuestra vida, para responder a lo que Él mismo nos va mostrando ...
Es así, como en 1638, Vicente, se ve obligado a tomar en sus manos una nueva obra particularmente urgente: "Los niños expósitos", olvidados de sus
padres, abandonados por sus madres, mirados con desprecio por la sociedad, niños nacidos en la miseria y en la vergüenza, considerados por la población de París, como "hijos del pecado y del vicio."
Eran dejados a su suerte en la puerta de los templos, o en la calle, a la vista de los transeúntes, otros son recogidos por el comisario del barrio y llevados a la casa cuna de Saint-Landry, pero su destino es lamentable ... se los vende por ocho sueldos a gente de mal vivir que les rompen brazos y piernas o les dejan morir de hambre, con tal de provocar la compasión de las personas y pedir limosna para sí.
Ante esta cruda realidad, el Señor Vicente, pide ayuda a las Damas de la Caridad para el cuidado de estas criaturas, las reúne y lleva un niño expósito, lo coloca en la mesa y les ruega se hagan cargo de él, que procuren verlos como a hijos de Dios, pero recibe un rechazo total, pues decía una y otra Dama: "Odio el pecado y los vicios, yo no amaré a estos niños", "son muy repugnantes", "no podré atenderlos y volver a mi casa para tocar a mis hijos" ... imaginamos qué dolor tan profundo para Vicente de Paúl... quien después de tantos argumentos de rechazo, les dice:
"Dios me pide que salve a este niño inocente antes que a nadie más ... seguiré recogiéndolos y los traeré, ustedes los verán peleary pedirles que los dejen vivir ... " "¿los dejarán morir? .. Qué lucha para ir contracorriente ante esa mentalidad. Se podría estimar que, entre 1600 y 1638, habrían muerto 1200 niños por falta de alimento y de cuidados.
Vicente sacó a flote esta obra frente a todos los prejuicios de las Damas de la Caridad; comienza por confiar algunos a Luisa de Marillac. Pero bien pronto toma la obra entera y le dedica una decena de Hij as de la Caridad y se levantan 13 casas para acogerles.
Gracias a Dios, la emoción de Vicente y la firmeza de sus disposiciones precisas obligan a la acción: las Damas se encargan el 30 de Marzo de 1640 de los niños que permanecen en la casa cuna de Saint Landry, a los más pequeños se las lleva a las nodrizas.
Por: Sor Celia Serquén
"Las obras de Dios tienen su momento, es entonces cuando su Providencia las lleva a cabo y no antes, ni después", estas son palabras de Vicente de Paúl que nos enseñan a descu brir el paso de Dios en nuestra vida, para responder a lo que Él mismo nos va mostrando ...
Es así, como en 1638, Vicente, se ve obligado a tomar en sus manos una nueva obra particularmente urgente: "Los niños expósitos", olvidados de sus
padres, abandonados por sus madres, mirados con desprecio por la sociedad, niños nacidos en la miseria y en la vergüenza, considerados por la población de París, como "hijos del pecado y del vicio."
Eran dejados a su suerte en la puerta de los templos, o en la calle, a la vista de los transeúntes, otros son recogidos por el comisario del barrio y llevados a la casa cuna de Saint-Landry, pero su destino es lamentable ... se los vende por ocho sueldos a gente de mal vivir que les rompen brazos y piernas o les dejan morir de hambre, con tal de provocar la compasión de las personas y pedir limosna para sí.
Ante esta cruda realidad, el Señor Vicente, pide ayuda a las Damas de la Caridad para el cuidado de estas criaturas, las reúne y lleva un niño expósito, lo coloca en la mesa y les ruega se hagan cargo de él, que procuren verlos como a hijos de Dios, pero recibe un rechazo total, pues decía una y otra Dama: "Odio el pecado y los vicios, yo no amaré a estos niños", "son muy repugnantes", "no podré atenderlos y volver a mi casa para tocar a mis hijos" ... imaginamos qué dolor tan profundo para Vicente de Paúl... quien después de tantos argumentos de rechazo, les dice:
"Dios me pide que salve a este niño inocente antes que a nadie más ... seguiré recogiéndolos y los traeré, ustedes los verán peleary pedirles que los dejen vivir ... " "¿los dejarán morir? .. Qué lucha para ir contracorriente ante esa mentalidad. Se podría estimar que, entre 1600 y 1638, habrían muerto 1200 niños por falta de alimento y de cuidados.
Vicente sacó a flote esta obra frente a todos los prejuicios de las Damas de la Caridad; comienza por confiar algunos a Luisa de Marillac. Pero bien pronto toma la obra entera y le dedica una decena de Hij as de la Caridad y se levantan 13 casas para acogerles.
Gracias a Dios, la emoción de Vicente y la firmeza de sus disposiciones precisas obligan a la acción: las Damas se encargan el 30 de Marzo de 1640 de los niños que permanecen en la casa cuna de Saint Landry, a los más pequeños se las lleva a las nodrizas.
Por: Sor Celia Serquén
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