LA EUCARISTIA EN LA BIBLIA

No creemos porque nos lo ha dicho sólo la Iglesia, o el Papa, o un teólogo o algún santo. Nuestra fe se basa en la palabra revelada, en la Biblia, Palabra de Dios que nos dice la verdad de Dios.


1.  PRIMERA CARTA DE PABLO A LOS CORINTIOS  -   AÑO  56

10:16   “La copa de bendición que bendecimos, ¿no es acaso comunión con la sangre de Cristo ?.  Y el pan que partimos, ¿no es comunión con el Cuerpo de Cristo?”

11, 23 -28  “Porque yo recibí una tradición que viene del Señor: que el Señor Jesús, la noche en que era entregado, tomó pan, dando gracias, lo partió y dijo: "Este es mi cuerpo que se entrega por vosotros, haced esto en memoria mía". Asimismo tomó el cáliz, después de cenar, diciendo: "Esta copa es la nueva Alianza en mi sangre. Cuantas veces la bebiereis, hacedlo en memoria mía". Pues cada vez que comáis este pan y bebáis de este cáliz, anunciáis la muerte del Señor, hasta que venga. Quien coma el pan o beba el cáliz del Señor indignamente, será reo del cuerpo y de la sangre del Señor.  Examínese pues, cada cual, y coma así del pan y beba del cáliz. Pues quien come y bebe sin discernir el Cuerpo, come y bebe su propia condena.”
SAN MATEO - AÑO 80  SAN MARCOS -  AÑO 70  SAN LUCAS - AÑO 80
26:26   Mientras estaban comiendo, tomó Jesús pan y lo bendijo, lo partió y, dándoselo a sus discípulos, dijo: «Tomad, comed, éste es mi cuerpo.»
26:27   Tomó luego una copa y, dadas las gracias, se la dio diciendo: «Bebed de ella todos,
26:28   porque ésta es mi sangre de la Alianza, que es derramada por muchos para perdón de los pecados.
26:29   Y os digo que desde ahora no beberé de este producto de la vid hasta el día aquel en que lo beba con vosotros, nuevo, en el Reino de mi Padre.»
14:22   Y mientras estaban comiendo, tomó pan, lo bendijo, lo partió y se lo dio y dijo: «Tomad, este es mi cuerpo.»
14:23   Tomó luego una copa y, dadas las gracias, se la dio, y bebieron todos de ella.
14:24   Y les dijo: «Esta es mi sangre de la Alianza, que es derramada por muchos.
14:25   Yo os aseguro que ya no beberé del producto de la vid hasta el día en que lo beba nuevo en el Reino de Dios.»
22:19   Tomó luego pan, y, dadas las gracias, lo partió y se lo dio diciendo: Este es mi cuerpo que es entregado por vosotros; haced esto en recuerdo mío.»
22:20   De igual modo, después de cenar, la copa, diciendo: «Esta copa es la Nueva Alianza en mi sangre, que es derramada por vosotros.
§  «Prefiero la misericordia al sacrificio, y el conocimiento de Dios al holocausto» (Mt 9,13 = Os 6,6).
§  «Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí» (Mt 15,79 = Is 29,13).
§  «Mi casa será llamada casa de oración, pero vosotros la habéis convertido en cueva de ladrones» (Mt 21,13 = Jer 7,7-11).

 

2.  EVANGELIO DE SAN JUAN - AÑO 90

6, 50 - 58  “Este es el pan que baja del cielo, para que quien lo coma no muera. Yo soy el pan vivo, bajado del cielo. Si uno come de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo le voy a dar, es mi carne por la vida del mundo.»  Discutían entre sí los judíos y decían: « ¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?»  Jesús les dijo: «En verdad, en verdad os digo: si no coméis la carne del Hijo del hombre, y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna, y yo le resucitaré el último día. Porque mi carne es verdadera comida y mi sangre verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí, y yo en él. Lo mismo que el Padre, que vive, me ha enviado y yo vivo por el Padre, también el que me coma vivirá por mí. Este es el pan bajado del cielo; no como el de vuestros padres, y murieron; el que coma este pan vivirá para siempre.»
6:66   “Desde entonces muchos de sus discípulos se volvieron atrás y ya no andaban con él”

3.  HECHOS DE LOS APÓSTOLES  - AÑO 80

2:42   “Se mantenían constantes en la enseñanza apostólica, en la comunión, en la fracción del pan y en las oraciones” .
2:46   “Acudían diariamente al Templo con perseverancia y con un mismo espíritu, partían el pan en las casas y tomaban el alimento con alegría y sencillez de corazón, 2:47   alabando a Dios y gozando de la simpatía de todo el pueblo. Por lo demás, el Señor agregaba al grupo a los que cada día se iban salvando”.